El padre de Lamine Yamal vuelve a hablar: «Mi felicidad es la ira de unos cuantos»
El padre de la estrella del Barcelona ha vuelto a dejar un mensaje a sus detractores en sus redes sociales
Mounir Nasraoui fue apuñalado en un párking y recibió el alta tras dos días ingresado
Prisión para el autor material del apuñalamiento al padre de Lamine Yamal
«Por lo que veo mi felicidad es la ira de unos cuantos. Gracias», es el último mensaje que Mounir Nasraoui, padre de Lamine Yamal, ha publicado en sus redes sociales como respuesta a aquellos que le han culpado del ataque que sufrió hace unos días por, supuestamente, estar metido en líos y relacionarse con gente peligrosa. Es la segunda ocasión en la que el padre del crack del Barcelona ha hablado tras ser apuñalado el pasado miércoles en un parking de Mataró.
Anteriormente, en El Chiringuito de Jugones, Mounir Nasraoui apareció en una conexión telefónica para asegurar que se encontraba bien y que tendrá que «estar más tranquilo por el bien de todos. Me he visto entre la vida y la muerte», relataba el padre de Lamine Yamal tan solo unas horas después de recibir el alta hospitalaria. Unas palabras con las que tranquilizó a todos después de la noticia que se conocía el miércoles por la noche, cuando varios medios de comunicación alertaban de que Mounir Nasraoui había sido apuñalado en Mataró y que había sido ingresado en el hospital de Can Ruti con pronóstico grave.
Sin embargo, y para felicidad de todos, un par de días después, el padre de la estrella emergente del club culé y de la selección española recibía el alta y volvía a casa aun con el susto en el cuerpo tras el ataque recibido por el que cuatro personas fueron detenidas. La noticia disparó los rumores y en las redes sociales los usuarios se dividieron entre los que culparon a los agresores de todo lo ocurrido y los que ven en el padre de Lamine un mal ejemplo para su hijo y le acusan de manchar la imagen del futbolista.
El padre de Lamine fue apuñalado
Ahora, el mensaje publicado por Mounir Nasraoui en sus redes sociales ha sido interpretado por algunos como una respuesta a un grupo concreto de personas y, por otros, como una defensa ante todos aquellos que han vertido opiniones negativas sobre él durante los últimos días señalándole como un irresponsable por, presuntamente, moverse en ambientes dudosos, algo que puede perjudicar la carrera y la imagen de su hijo en plena eclosión del jugador que, recordemos, tan solo tiene 17 años demasiado joven como para enfrentarse a situaciones así.
Al parecer, todo comenzó el pasado miércoles, día de la agresión, sobre las 17:00 horas, cuando unos vecinos del barrio en el que reside la familia del futbolista desde hace años arrojaron agua al padre de Lamine cuando paseaba por la calle con su perro. Minutos después, comenzaba un forcejeo del que los vecinos implicados culpan a Mounir Nasraoui por su fuerte carácter, pero que, según testigos presenciales, no fue así, ya que fue el padre de la estrella del Barcelona el que fue agredido.
Tan solo unas horas después, sobre las 21:00 horas, fue atacado en un parking de Mataró por varias personas con un destornillador, motivo por el cual fue hospitalizado 48 horas hasta que fue dado de alta el pasado viernes por la noche y por el que la Policía detuvo a cuatro personas.