En-Nesyri golea en el trámite

El Sevilla cierra la fase de grupos de la Champions League con una victoria trámite y contundente ante el Stade Rennes (1-3). El conjunto hispalense se relame las heridas de los dos últimos encuentros con una solvente victoria gracias a los goles de Koundé y En-Nesyri, que hizo un doblete. En el tramo final, redujo diferencias Rutter desde el punto de penalti. Con todo decidido en el Grupo E, lo único que había en juego era el premio económico de tres millones de euros, que se irán para las arcas del Sánchez-Pizjuán y que no vienen nada mal en medio de la crisis económica por el descenso considerable de los ingresos en la que se están viendo inmersos los clubes.

Tras las críticas por las rotaciones en la quinta jornada, en las que los de Lopetegui se jugaban el liderato del grupo y cayeron por 0-4, el técnico volvía a introducir siete cambios respecto a sus habituales. No le salió bien el plan de reservar jugadores para el partido ante el Real Madrid, pero el resultado no le hizo cambiar sus planes para el partido ante el Rennes. Sergi Gómez, Rekik, Óliver Torres, Gudelj, Idrissi, En-Nesyri y Suso entraban en el once.

En lo deportivo no había nada en juego. Los sevillistas serían segundos pasara lo que pasara, mientras que los franceses no tenían opciones de terminar terceros, tras caer ante el Krasnodar en la jornada anterior. Sin embargo, buscando cerrar su presencia en esta edición de la Liga de Campeones con su primera victoria, los galos salieron buscando el gol desde los primeros minutos.

Liderados por Eduardo Camavinga en el centro del campo, el Rennes acechaba la portería de Bono y cerca estuvieron de encontrarse con el gol. El peligro era constante en los primeros compases del partido y estuvo cerca de materializarse en el minuto 8. Entonces, un disparo de Niang se estrellaba en la madera.

No reaccionaba el Sevilla, que se vio bastante superado en la primera media hora de juego. Necesitaron un segundo aviso claro de Niang para meterse en el partido. Una internada de Doku hasta el área terminó con un pase atrás para el senegalés, que la colocó al palo. Apareció Bono, esta vez seguro al despeje, para desviar a córner.

A partir de entonces el conjunto hispalense reaccionó. Los de Lopetegui se vinieron arriba y se encontraron con el gol prácticamente en la primera oportunidad de la que dispusieron. Rekik mandó un centro pasado al área que bajó Idrissi. Erró al controlar el marroquí y el balón cayó en la frontal, donde Koundé aparecía para mandar un bombeado disparo a la escuadra de la portería.

Pasada la media hora de juego, el Sevilla lograba adelantarse en el marcador. Desde entonces, los hispalenses se dedicaron a controlar el balón, aprovechando el bajón que supuso para los franceses. El Stade Rennes lo había intentado con ahínco, pero su falta de efectividad tuvo un castigo que les hizo bajar los brazos.

En-Nesyri llena las arcas sevillistas

Dominaba claramente el Sevilla, buscando más que el reloj corriera que el segundo gol, cuando En-Nesyri puso la tranquilidad. En la última jugada de la primera mitad, Idrissi se la daba a Óliver en el centro del campo. Condujo por la banda el español, que se revolvió ante dos rivales y metió un centro preciso que leyó muy bien el delantero. Se anticipó al primer palo para mandar de un tremendo cabezazo el balón al fondo de la red.

El Sevilla jugó con el marcador durante la segunda mitad, pensando más en reservar para la Liga. Pudo costarles caro. Con el paso de los minutos, el Rennes fue haciéndose con el balón y poniendo de nuevo en compromisos a la defensa hispalense. Pero cuando mejor estaban, llegó el tercero que dejaba sentenciado, sino lo estaba ya, el encuentro.

De un fallo en un despeje en el centro del campo se aprovechó Ocampos, que acababa de ingresar. Tras una breve conducción, tocó para Óscar Rodríguez. El canterano del Real Madrid vio el desmarque de En-Nesyri y le puso un balón al espacio. El marroquí controló y se la cruzó a Salin, que no pudo hacer nada por evitar el tanto.

Con el partido ya resuelto, llegó el gol del Rennes. El colegiado señaló una falta de Franco Vázquez fuera del área, pero acudió a la llamada del VAR. Justo después de esa acción, aún con el balón en juego, Diego Carlos derribaba a un desdibujado Camavinga en el área. La pena máxima fue convertida por Rutter.

El partido terminó tras cuatro minutos de añadido con victoria balsámica del Sevilla. Prácticamente sin despeinarse, se impusieron a uno de los rivales que amenazaba antes de comenzar la fase de grupos con complicarles la clasificación. Al final, los de Lopetegui terminan segundos, con 13 puntos, tras perder únicamente contra el Chelsea. Además, hacen caja gracias a En-Nesyri y se llevan tres millones de euros gracias a la victoria.