La Liga Endesa apuesta por el producto español
Apostar por una idea cuando siempre te has volcado en otra nunca suele ser tarea sencilla. La Liga Endesa se ha dado cuenta de que el producto español vive un periodo pujante tras vencer en el EuroBasket con nueve jugadores de aquella selección compitiendo en el campeonato doméstico. Y claro, se han preguntado: ¿por qué no vamos a aprovecharlo para difundir de otra manera la competición?
Esta decisión ha conllevado consecuencias inmediatas, pero positivas -a ojos de la mayoría- para la competición. Pese a que ayer no estuvieron representados los 18 equipos de la Liga, -sólo siete- la mayoría quedó satisfecha por ver a gente conocida para el gran público. Todos los jugadores presentes en la tertulia dirigida por Juanma Iturriaga y Ántoni Daimiel -otros dos rostros reconocidos- habían vestido o entrenado con la camiseta de la Selección española en los últimos dos años, asumiendo en cuenta el foco que eso supone. El nuevo eslogan de la competición Una Liga de Oro y la reciente medalla en dorada en Lille no son meras casualidades.
Además se apostó por una presentación distendida, a diferencia de otras ocasiones, donde se enunciaba el nombre del jugador y se realizaba una pasarela que nunca tenía fin. Y sin presencia de extranjeros -ni jugadores ni técnicos- que en otras ocasiones llegaron a ser mayoría. “El entrenador español es muy bueno y lo demuestra. Por eso tenemos entrenadores por todo el mundo”, dijo Pablo Laso, que estuvo acompañado en la tertulia de técnicos por Xavi Pascual, Aíto García Reneses, Luis Casimiro y Joan Plaza.
Antes que ellos fueron los jugadores los que compartieron varios juegos y anécdotas con los presentadores. A la pregunta, sobre con qué cualidad se quedarían del jugador de su derecha todos dieron respuestas diferentes. “Yo a Navarro le quitaría su desparpajo”, dijo Felipe Reyes. “Yo me quedaría con el rebote de Dani Díez”, apuntó Navarro. “Yo le robaría la defensa a Guillen Vives”, añadió Díez. “Yo le quitaba a Juancho Hernangómez su físico genéticamente perfecto”, enunció Vives. “Yo quisiera tener la ambición de Felipe”, zanjó el mediano de la saga de los Hernangómez. El baloncesto español vuelve a pensar en la masa, en la creación de ídolos, en el producto nacional.