España podría quedarse sin baloncesto en Río
La selección española de baloncesto podría enfrentarse a una sanción sin precedentes. La actual guerra abierta entre la FIBA y la Euroliga por el control del baloncesto en Europa puede acabar impidiendo a la generación de Pau Gasol despedirse en los Juegos Olímpicos de Río. Lo más polémico de todo es que este problema ha surgido de una decisión de la Asamblea de la Liga ACB, totalmente ajena a la selección española.
Dicho organismo se posicionó a favor de la propuesta de la Euroliga para que los equipos españoles participen la próxima temporada en sus competiciones. La FIBA, que controla los torneos internacionales de baloncesto, ya ha amenazado con sancionar a aquellas ligas o federaciones que no se adhieran al plan de la Champions League que han planeado de cara a la próxima temporada.
«Cualquier federación nacional que apoye a la Euroliga permitiendo que sus ligas o clubes alcancen acuerdos con esta última o cualquier entidad directa o indirectamente relacionada con ella, perderá automáticamente su derecho a participar en las competiciones séniors de países organizadas por FIBA o FIBA Europa», explicó la FIBA en un comunicado hace dos semanas.
Cisma en el baloncesto nacional
España, por tanto, se encuentra en una encrucijada de gran calibre, puesto que la Federación Española de Baloncesto –la encargada de reunir a la selección– no puede hacer nada para revocar la decisión de la ACB, pese a su postura cercana al máximo organismo del baloncesto. La FIBA cuenta con el apoyo de las Ligas de Francia, Italia, Turquía, Grecia, Israel, Lituania, Bélgica, Polonia y la República Checa para su nuevo campeonato. En este caso, España es la única selección olímpica clasificada que no se ha adherido al plan de la FIBA.
La ACB, no obstante, permitirá «la libre participación de otros clubes españoles integrantes en la Liga organizada por la FIBA (Champions League)», aunque las posiciones prioritarias son para la Euroliga y la Eurocup –ambas organizadas por el estamento de Jordi Bertomeu–, tal y como manifestó la organización en un comunicado.
Así las cosas, España podría perder su derecho a participar en los Juegos Olímpicos de 2016 o en el EuroBasket de 2017. La situación en el baloncesto español es alarmante por un conflicto de despachos. No ver a Pau Gasol y compañía en Río está en juego.