Día uno de la operación salida en el Real Madrid

Día 1 de la operación salida. El batacazo del equipo ante el Ajax de Ámsterdam en el Santiago Bernabéu pone fin a la temporada de forma prematura para los blancos. El equipo se desintegró en la Champions League ante el conjunto holandés por todos sus extremos hasta quedar reducido a la mínima expresión. Fue un ridículo mayúsculo el que vivieron plantilla y un Santiago Solari que tiene las horas contadas en el Real Madrid, así como un buen número de sus jugadores, tras un curso «de mierda», que tiene ya sobre el cuello el cordón del que cuelga el cartelón de transferible.

Desde la dirección deportiva madridista tienen claro cuáles son las directrices a seguir de aquí a que concluya una temporada que se hará más larga de lo habitual, despojados de cualquier posibilidad de título a la vista. Es por ello que en la operación salida hay un buen número de jugadores por los que el club escuchará ofertas y se sentará a discutir con aquellos interesados. No harán oídos sordos por ningún jugador, pero sí pondrán facilidades para otros a los que se ha terminado de echar la cruz. El nivel físico ínfimo de algunos blancos que otrora fueron intocables, hoy tienen el cartel de transferibles, justamente colocado. Entre ellos están algunos obvios como Keylor Navas, Isco Alarcón, Gareth Bale, Jesús Vallejo, Dani Ceballos o Mariano Díaz, pero también están en ese grupo otros como Karim Benzema y el último Balón de Oro, Luka Modric.

Retales de un ciclo

El primer grupo de jugadores ha ido dilapidando sus opciones de continuar en la casa blanca durante toda la temporada. Al meta costarricense se le colgó el cartel nada más arrancar la temporada, tras la llegada de Thibaut Courtois. Su permanencia en la plantilla esta temporada no es más que la seguridad que otorgar un segundo portero del nivel de Navas. No seguirá la próxima campaña. Las vidas de Isco Alarcón y Gareth Bale son similares, dos destinados a ser capitales este año, relevados al banquillo o a la grada. Sus estados de rebeldía y su baja forma física chocaron con Solari, su verdugo. Los casos de Vallejo, Ceballos y Mariano son ejemplos de oportunidades perdidas, sobre todo en los casos del primero y el último; el utrerano respondió en diferentes momentos de la temporada pero su intermitencia le ha penalizado.

Caso a parte son Luka Modric y Karim Benzema. El croata, tras una actuación soberbia la pasada temporada en Champions League y con la selección croata en el Mundial, ha dado un paso atrás físico en este curso. Se le notaba en las piernas al balcánico que no podía estar en todos lados y que su precisión y elegancia se agotaban. Aún le queda fútbol pero el Real Madrid exige un ritmo que quizá tiene ya agotado. Benzema ha sido uno de los pocos que ha mostrado consistencia durante la mediocre temporada de todo el grupo. Encontró sociedad con Vinicius pero en el momento de la verdad se le acabó la magia: no puede ser el líder que el madridismo quiere.

 A expensas del nuevo entrenador

La gran reestructuración que se prepara en el seno del club tiene un eslabón importantísimo del que dependerá gran parte del nuevo proyecto. El elegido para ocupar el banquillo del Real Madrid la próxima temporada será jerarca e importante en la confección de la plantilla. Es por ello que todos estos que tienen el cartel de transferible ahora pueden obtener su redención de llegar un técnico que apueste por ellos.

El nuevo técnico tendrá la última palabra en todos y cada uno de los nombres que ahora tiene el cartelón de transferibles. Además, al igual que puede despojar de ese cartel a los transferibles, a los que ahora se ven intocables podría llegarles el camino inverso de verlo consecuente el nuevo inquilino blanco en el banquillo. Esto no ha hecho nada más que empezar…