Ni vinagre ni azúcar: el sorprendente truco del chef Jose Andrés para que los pimientos de bote parezcan gourmet

El cocinero asturiano tiene un método sencillo para transformar unos pimientos del piquillo en conserva en una tapa con sabor a restaurante caro, sin recurrir al azúcar ni a los típicos vinagres balsámicos. Un toque de aceite de oliva virgen extra, un poco de tomillo y un diente de ajo machacado son su arma secreta para potenciar el sabor y la textura.

En este artículo, nos centraremos en este truco del chef José Andrés y en cómo aplicar esa mezcla tan simple —aceite de oliva virgen extra, tomillo y ajo— para mejorar el sabor sin añadir azúcar ni vinagre. También encontrarás algunas ideas rápidas con pimientos para variar tus cenas.

El truco del chef para subir el nivel de los pimientos de bote

La idea de José Andrés es muy sencilla: concentrar el sabor de los pimientos y aprovechar su propio jugo para crear una crema que los envuelve y les da una textura más sedosa. No hay que añadir ingredientes raros ni buscar una reducción dulce. El trabajo lo hacen el fuego y el aceite.

El proceso empieza calentando una sartén con una capa fina de aceite de oliva. Es suficiente con que cubra mínimamente la base. Ahí colocas los pimientos del piquillo y los dejas a fuego medio hasta que pierdan parte del líquido de la conserva. No se trata de tostarlos, sino de dejarlos más firmes y sabrosos. Cuando cambian de textura, les das la vuelta y repites el mismo proceso del otro lado.

El jugo del bote, que normalmente tiras sin pensarlo, aquí se aprovecha. Lo colocas en un vaso de batidora junto con unos cuantos pimientos y lo trituras hasta obtener un puré espeso. Esa mezcla será la parte cremosa del plato.

En una cazuela pequeña o una fuente que puedas poner al fuego, colocas los pimientos ya deshidratados formando una capa. Añades los dientes de ajo ligeramente machacados para que liberen aroma y espolvoreas tomillo al gusto. Después viertes el puré por encima y terminas con un chorrito de aceite de oliva. Lo cocinas todo a fuego suave durante unos minutos hasta que se confiten. La textura final es suave, tersa y con un sabor muy concentrado.

Otras ideas fáciles para sacar partido a los pimientos de piquillo

Si te quedas con ganas de más, los pimientos en conserva dan mucho juego incluso en recetas improvisadas. Puedes preparar opciones rápidas que no requieren técnica ni ingredientes complicados.

• Hummus de piquillo. Tritura garbanzos cocidos con pimientos, tahini, limón y comino. Queda más ligero que el hummus clásico y va genial con crudités o pan de pita.
• Piquillos con huevo escalfado. Calienta los pimientos con un poco de su jugo, casca encima un huevo y tápalo unos minutos.
• Pasta con piquillo y albahaca. Haz una salsa triturando pimientos, un poco de nata o yogur y ajo. Mézclala con pasta corta y termina con albahaca fresca.
• Piquillos con queso azul. Calienta los pimientos en sartén y añade un poco de queso azul para que se funda. Funciona muy bien sobre pan tostado.

Los pimientos en conserva son un recurso sencillo, barato y lleno de sabor. Con un par de trucos y combinaciones distintas, puedes pasar de un plato básico a uno que parece sacado de una barra de tapas moderna.