Feng Shui

La experta en Feng Shui lo advierte: estos objetos en tu cocina te roban energía y atraen el desorden

Cocina y Feng Shui
Janire Manzanas
  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

La cocina no es simplemente un espacio funcional donde cocinamos y comemos, sino que es el corazón del hogar, donde se transforma la energía de los alimentos y se distribuye por toda la casa, así que es esencial mantenerla limpia y organizada. Esto no sólo mejora la estética y la higiene, sino que también permite que el «chi» fluya de manera positiva. De lo contrario, según el Feng Shui, la cocina se puede convertir en un espacio donde se acumula energía negativa, la cual podría incluso afectar a la calidad de los alimentos y, por ende, a nuestra salud.

Esta disciplina milenaria china nos enseña lecciones muy valiosas que van más allá de la decoración del hogar. En la cocina, los alimentos crudos, como frutas y verduras, son los más sensibles a la energía negativa. Según Lillian Too, experta en Feng Shui «ordenar la cocina regularmente es clave para evitar la acumulación de chi yin. No basta con limpiar de vez en cuando: es necesario prestar atención a cada detalle, desde los utensilios hasta los alimentos almacenados, para mantener un flujo de energía positivo».

Cómo revitalizar la cocina según el Feng Shui

Uno de los errores más habituales es llenar la nevera sin revisar lo que ya hay dentro. ¿El resultado? Muchos alimentos quedan olvidados en la parte trasera y, con el tiempo, nos vemos obligados a tirar aquellos en mal estado. Más allá del desperdicio alimentario, puede bloquear la energía positiva. Lillian recomienda lo siguiente: «dedica tiempo a limpiar la nevera una vez al mes. Revisa todos los alimentos, descarta los que estén en mal estado y organiza los productos restantes de manera visible. Esto no solo mejora la higiene, sino que también permite que el «chi» circule correctamente».

Por otro lado, los utensilios viejos o rotos pueden generar bloqueos energéticos en la cocina según el Feng Shui: «toda la basura física es negativa y debe eliminarse. Esto incluye comida pasada, envases rotos y utensilios deteriorados. Conserva sólo lo que esté en buen estado y que realmente uses».  Aunque a veces nos aferremos a objetos por su valor sentimental, mantenerlos en la cocina interfiere con el flujo de energía y fomenta el desorden.

Un consejo que puede parecer exagerado, pero que el Feng Shui considera crucial, es revisar los cubos de basura con frecuencia. «La comida podrida y los desechos no solo generan malos olores, sino que bloquean la energía positiva y pueden afectar a todos los que viven en la casa», comenta Lillian Too, según recoge la revista Lecturas. Y añade: «he visto cocinas descuidadas arruinar más matrimonios y provocar más disgustos de los que puedo recordar».

Asimismo, el Feng Shui considera que las encimeras despejadas permiten que la energía fluya libremente. «Cada objeto que colocamos sobre la encimera tiene un efecto sobre la energía de la cocina. Cuantos menos trastos innecesarios haya, mejor será la circulación del «chi» y más agradable será el ambiente».

La energía de los alimentos

El Feng Shui diferencia entre alimentos cocinados y alimentos crudos. Los alimentos cocinados, como guisos, sopas o carnes, tienen una energía relativamente neutra. Por otro lado, los alimentos crudos son más sensibles a la energía del entorno. Si consumes alimentos crudos con frecuencia, es fundamental que la cocina esté libre de desorden y suciedad, ya que estos alimentos absorben la energía negativa con mayor facilidad.

Los colores de los alimentos también influyen en la energía que aportan al hogar:

  • Rojo y naranja: asociados con la vitalidad, la pasión y la energía yang. Incluye tomates, pimientos, zanahorias y naranjas.
  • Verde: simboliza crecimiento, salud y renovación. Verduras, hierbas y frutas verdes aportan frescura y equilibrio.
  • Amarillo: representa alegría, claridad y comunicación. Piña, maíz y plátanos son ejemplos que activan esta energía.
  • Blanco: ligado a la pureza y la claridad mental. Ajo, cebolla, coliflor y arroz aportan energía de enfoque y limpieza.
  • Negro o morado oscuro: simbolizan profundidad y protección. Uvas, ciruelas y berenjenas ayudan a equilibrar energías densas.

En el Feng Shui, hay una serie de alimentos que potencian la energía positiva:

  • Frutas frescas: manzanas, naranjas, plátanos y uvas aportan vitalidad y prosperidad.
  • Verduras de hoja verde: espinacas, lechuga y acelgas favorecen la salud y la renovación.
  • Granos integrales: arroz integral, avena y quinoa activan la energía de estabilidad y sustento.
  • Hierbas frescas: albahaca, perejil y menta limpian y revitalizan la energía del hogar.
  • Legumbres: lentejas, garbanzos y frijoles aportan energía nutritiva y equilibrada.

Así como ciertos alimentos potencian el «chi», otros pueden generar desequilibrio, como los alimentos procesados o en mal estado. El principio es simple: cuanto más natural, fresco y limpio sea el alimento, más positiva será su energía. El Feng Shui nos enseña que la alimentación también es energética. Cada alimento que consumimos, el orden en que lo guardamos y la limpieza de la cocina afectan el flujo del «chi» en el hogar.

Lo último en Curiosidades

Últimas noticias