Un artista ruso, detenido tras incendiar las puertas de la antigua KGB
En 2013, Piotr Pavlenski clavó literalmente su escroto en los adoquines de la plaza Roja de Moscú como «metáfora de la apatía, indiferencia política y fatalismo de la sociedad actual rusa». Entonces, la justicia archivó el caso al considerar que no había cometido ninguna infracción.
El artista está no obstante bajo investigación por haber quemado neumáticos en plena calle en San Petersburgo en febrero de 2014 en apoyo a las manifestaciones antigubernamentales de aquel momento en Kiev. En las últimas horas, el fuego ha vuelto a ponerle de actualidad.
Pavlenski ha incendiado las puertas de la Lubianka, el imponente edificio que albergó durante años el Comité para la Seguridad del Estado (KGB) y ahora el Servicio Federal de Seguridad (FSB), muy cerca del Kremlin. Apenas ha tenido tiempo para grabarse frente a las llamas antes de ser detenido.
«El FSB utiliza el terror sin fin para mantener bajo su poder a 146 millones de personas (población de Rusia)», dice Pavlenski en un mensaje junto al vídeo. Los periodistas que han cubierto y divulgado la performance también han sido llevados a dependencias policiales.