Las primeras imágenes de Ariana Grande «histérica» tras el atentado

Tras el terrible atentado ocurrido en Manchester el pasado lunes, en el que murieron al menos 22 personas y otras 60 resultaron heridas de gravedad, las cámaras estaban al quite para captar las primeras imágenes de Ariana Grande tras el terrible suceso.

Ariana Grande regresó este martes a Florida junto a su madre, Joan, en un avión privado. Al salir del avión, los fotógrafos que se encontraban esperándola captaron su cara de tristeza y sus ojos al borde de las lágrimas. Las imágenes las publica, en exclusiva, el medio británico Daily Mail.

Aunque no esté oficialmente confirmado, el avión en el que Ariana Grande volvió a Estados Unidos fue uno de los jets privados de la también cantante, Taylor Swift. Aunque según fuentes cercanas a la promotora de Grande, los gastos de dicho traslado corrieron a su cuenta, y no de Swift.

El atentado tuvo lugar al finalizar el concierto de la artista en Manchester, dentro de su gira ‘DAngerous Woman Tour’. La cantante, terriblemente afectada por el suceso, ha decidido suspender hasta nuevo aviso su gira europea. Según dicen fuentes cercanas a la joven Grande, está «histérica» y no quiere hablar con nadie. Vestida totalmente de negro, en luto por las víctimas de este nuevo atentado contra la humanidad en el que han perdido la vida adolescentes y niños, se refugió en los brazos de su pareja, Mac Miller, que le esperaba en el aeropuerto. Miller también abrazó a la madre de Ariana, que también aterrizó vestida totalmente de negro en señal de luto.

broken.
from the bottom of my heart, i am so so sorry. i don’t have words.

— Ariana Grande (@ArianaGrande) 23 de mayo de 2017

La madre de Ariana, Joan, no se separa de su hija ni un momento. Cabe remarcar la heroica actuación de la progenitora de la joven cantante cuando en el momento de la explosión decidió refugiar a varios jóvenes en el camerino de la artista.

Joan se encontraba aun en su asiento de primera fila cuando tuvo lugar el ataque, y en vez de salir huyendo a refugiarse no dudó ni un momento en recoger a los jóvenes que se encontraban cerca suya y llevarlos a un lugar seguro: los camerinos internos del recinto. Ahí esperó hasta que las autoridades les comunicaron que era seguro salir.