Un vídeo científico de la Universidad Católica desmonta la campaña del IVAJ de Oltra sobre ‘chemsex’
‘¿Drogarse de forma segura?’, bajo este título el Observatorio de Bioética de la Universidad Católica de Valencia rechaza con argumentos científicos los consejos en torno al ‘chemsex’ o práctica de relaciones sexuales bajo el efecto de las drogas, que incluía la campaña cuyo nombre en español sería ‘Aquí hay tema’ impulsada por el Instituto Valenciano de la Juventud (IVAJ), organismo dependiente de la Consejería que dirige Mónica Oltra (Compromís) vicepresidenta primera de la Generalitat Valenciana y consejera de Igualdad y Políticas Inclusivas en el Gobierno que preside el socialista Ximo Puig. «El sexo promiscuo nunca es seguro», defiende el citado Observatorio de Bioética con una detallada argumentación en un vídeo.
La mencionada campaña en torno al chemsex ha obtenido duras críticas desde distintos sectores. La Fundación Española de Abogados Cristianos, que preside Polonia Castellanos se ha querellado tanto contra el director general del IVAJ como contra la directora de Salud Pública valenciana al apreciar un presunto delito, precisamente contra la salud pública. Abogados Cristianos impulsa, además, una masiva recogida de firmas. Ayer, ya había recabado cerca de 20.000 para reclamar a Ximo Puig el cese de los cargos contra los que se ha querellado.
Pero, además, el Observatorio de Bioética de la Universidad Católica de Valencia ha creído conveniente lanzar un vídeo en el que pone en evidencia las afirmaciones sobre el ‘chemsex’ que en la citada campaña en redes se realizaban. Y lo hace bajo argumentos científicos.
En concreto, según reza en el inicio del citado vídeo es el director del citado instituto, Julio Tudela, quien define el ‘chemsex’ como «la práctica de relaciones sexuales bajo el efecto de las drogas». Y puntualiza que promocionar el sexo promiscuo nunca es seguro. Al contrario, existe el «riesgo de contraer enfermedades, que pueden ser muy lesivas a largo plazo».
En el vídeo se explica que «no hay manera responsable de consumir drogas», porque «alteran la conciencia, quebrantan la voluntad de la persona que las consume y la inducen en un proceso degenerativo, progresivo, que va alterar severamente su comportamiento». Por ello, desmiente otro mantra: «Es una falacia absoluta hablar de control o seguridad en el manejo de las drogas. Esto, no es posible».
Añade el experto que el consumo de drogas, «que conduce al descontrol, a la pérdida de voluntad y a la incapacidad para tomar medidas de precaución, unido a la promoción del sexo promiscuo», constituye «una mezcla explosiva, que nunca debería justificarse. En ningún caso. Ni animar a nadie a practicarlo porque lo que se está haciendo es minar su propia salud y, al final, su libertad».