La llegada a casa con el recién nacido: Qué hacer y cómo organizarse
Descubre cómo tenéis que organizaros con el bebé en casa durante los primeros días. Qué rutinas poner en marcha para que todo se desarrolle de manera correcta.
Tener un bebé es una de las mayores emociones que los padres pueden sentir, pero tras dar a luz, la llegada del bebé a casa, supone un sinfín de cambios y preocupaciones que pueden llegar a ser algo agobiantes. Veamos entonces qué sucede con la llegada a casa con el recién nacido: Qué hacer y cómo organizarse.
Tras los nueve meses de espera, y las semanas preparando la casa y el dormitorio del bebé, este por fin ha llegado de modo que lo primero que tenemos que hacer es centrarnos en que esté bien atendido, que también la madre descanse pero además, podemos daros algunos consejos sobre cómo organizarse mejor para el comienzo de una nueva vida junto con el bebé.
La llegada a casa con el recién nacido: Qué hacer y cómo organizarse
Cuando el niño nace en el hospital , el regreso a casa generalmente se realiza en automóvil. Incluso si se trata de un viaje corto, debe organizarse de manera cómoda y segura. Debemos entonces tener instalado el cuco del bebé en el asiento trasero del coche, con el cinturón bien fijado y colocar al bebé sin que tenga mucha ropa encima que pueda molestar a su sujeción. Es aconsejable además que la madre, o un familiar, vaya junto a la sillita para asegurarse que el bebé está bien en todo momento.
Bebé en casa ¿cómo actuar si tenemos mascotas?
Nada más llegar a casa, es necesario «presentar» al bebé al resto de integrantes de la familia. No nos referimos a hermanos mayores o familiares, dado que seguramente ya lo habrán visto en el hospital sino al hecho de tener mascota, y en especial si tenemos un perro ya que estos son los que en definitiva pueden «aceptar» más o menos al nuevo miembro de la que para él ya es su «manada».
Es mejor que el animal esté en casa cuando nosotros lleguemos con el bebé (si durante el tiempo en el hospital, la mascota ha sido cuidada por un amigo o familiar, le pediremos que nos lo lleve a casa antes de que lleguemos nosotros) y nada más entrar, le acerquemos al bebé para que lo huela, lo conozca y lo adopte como un miembro más de la ya mencionada «manada».
Esta es sin duda una acción que parece trivial o que muchos padres pueden considerar «peligrosa» dada la delicadeza del bebé, pero lo cierto es que es el modo en el que vamos a conseguir que el perro no se ponga celoso y acepte que ahora tal vez, vamos a estar un poco más ocupados con el bebé.
Las primeras atenciones hacia el bebé en casa
Nada más llegar podemos dirigirnos a nuestro dormitorio o al del bebé, donde quitarle la ropita que lleve, quizás cambiarle el primer pañal en casa y ponerle más cómodo.
Es importante además tenerlo todo a mano para que cambiar al bebé esos primeros días sea más fácil. Por ejemplo, si el bebé va a dormir con nosotros, podemos disponer de un espacio en el que colocar las cosas para cambiarle.
Donde ponerlo a dormir
Esta es la gran duda para muchos padres, pero para los que no sepan qué hacer, es importante saber que la necesidad de contacto y cercanía de los recién nacidos es absolutamente normal y fisiológica y que se recomienda dormir en la misma habitación durante el primer año de vida del niño.
En este caso, podéis elegir una cuna clásica para colocarla más o menos cerca de la cama , o un moisés junto a la cama, recomendada especialmente si la madre está amamantando y quiere hacerlo durante el mayor tiempo posible, y más si tenemos en cuenta que durante la noche, la madre tendrá que alimentar también a su bebé.
En cuanto al tema controvertido de compartir la cama con el recién nacido, que muchos critican por los posibles riesgos para la seguridad del niño, varios expertos señalan que, en lugar de desaconsejarlo directamente (ya que muchas madres terminan cediendo debido a la fatiga), sería más apropiado recordar los criterios de seguridad esencial para poder dormir con el bebé y que son:
- Ambiente no demasiado caluroso;
- colocar SIEMPRE al bebé boca abajo;
- que los padres no fumen en la habitación;
- que no haya edredones o mantas demasiado abundantes. Prestad además atención al hecho de que las mantas (ligeras) nunca pueden cubrir la cabeza del bebé. Si los padres tienen frío, pueden usar pijamas que sean más gruesos;
- colchón rígido, sin espacios o intersticios en los que el niño pueda quedar atrapado;
- que no haya hermanos o mascotas en la cama;
- es mejor colocar al bebé siempre al lado de la cama, hacia la madre (no en el medio). Se debe montar una protección especial en el costado de la cama para evitar que el niño se caiga.
El cuidado del cordón y el baño del bebé
En los primeros días en casa, el niño probablemente todavía tendrá el muñón del cordón umbilical. En el hospital os dirán cómo curarlo, pero lo básico es dejarlo al aire para que se seque cuanto antes y eso sí, limpiarlo todos los días con un poco de alcohol y cubrirlo solo con una gasa en el caso de que el pañal toque la herida.
En cuanto al baño, no es necesario que los primeros días bañemos al bebé, pero en el caso de que se haya manchado más de la cuenta al comer o al hacer sus necesidades, bastará con limpiarle sobre una toalla seca, con la ayuda de una esponja sumergida en agua tibia y una gota de jabón neutro.
Qué hacer cuando el bebé llora
Los primeros momentos de llanto del bebé pueden ser un caos para los padres, en especial cuando son primerizos, pero no debemos entrar en pánico.
Dependiendo de la hora a la que llore puede significar varias cosas, que tiene hambre, que se ha hecho pipí o caca o que le duele la barriguita por un cólico. Debemos entonces identificar el llanto, por lo que la solución es coger al bebé, comprobar si tiene hambre ofreciendo el pecho o un biberón, también mirar si ha manchado el pañal o sencillamente acunarlo en brazos para que se calme.
La lactancia del bebé
En cuanto a la lactancia, si la madre ha decidido dar el pecho a su bebé, seguro que habrá tenido en el hospital de comenzar con ella y de que le hayan explicado cómo colocar al bebé y cómo colocarse ella para que los dos estén cómodos. En casa, es mejor que la madre se acostumbre a dar el pecho en un ambiente relajado en el que nadie moleste, y sobre todo establecer un horario para que el bebé esté bien alimentado.
De este modo, si a la madre le va mejor alimentar al bebé tumbada en la cama, deberá colocarse en posición semi-recostada y coger en su regazo al bebé, procurando que la boca tiene acceso pleno al pezón que debe succionar y sin olvidar, que deberá comer de ambos senos.
Por la noche no debemos ponernos una alarma para despertarnos, porque ya será el llanto del bebé el que se encargue de decir que tiene hambre y de despertarnos.
En el caso de practicar la lactancia con leche de fórmula y biberón. Será necesario estar más alerta de los horarios y las tomas del bebé, de modo que podamos tener preparado el biberón antes de que el bebé se ponga a llorar, en especial por la noche.
¿Qué necesita mamá?
Puede parecer una respuesta banal, pero en los primeros días en casa con su bebé, la madre necesita sobre todo dos cosas: descansar y ayuda.
Como se suele aconsejar, la madre debe descansar cada vez que el bebé duerme, porque necesita recuperar energía. Obviamente, esto se vuelve más complicado si en casa hay un ir y venir de amigos y familiares que han llegado a conocer al recién llegado.
En realidad, lo ideal es que los padres avisen a todo el mundo que los primeros días es mejor que nadie les visite y que ya habrá momento para conocer al bebé pasadas al menos un par de semanas. Cuando la llegada del bebé ya se haya establecido una primera rutina.
En cuanto a la ayuda, la madre debe apoyarse en su pareja, pero también en sus propios padres, en una hermana o hermano o en quien sea que sienta que es indispensable en ese momento.
El rol de papá
Es absolutamente esencial que el padre esté involucrado desde el primer día en la vida de su bebé, para que entienda cómo la lactancia puede ser agotadora en las primeras semanas y, por lo tanto, estar disponible para ayudar concretamente en todo lo que no sea la lactancia así que es completamente normal que en los primeros días no duerma mucho. Y de nuevo, es importante que comprenda cuánto debe protegerse la pareja madre-hijo en los primeros días de la interferencia de familiares y amigos.
Pero el padre no debería involucrarse solo para ayudar: también debería involucrarse para construir una buena relación lo antes posible con su bebé. Esta es la razón por la cual el bebé no debe ser algo exclusivo de la madre. De hecho la pareja se puede turnar y mientras uno descansa, el otro puede cuidar del pequeño.
Disfrutad del bebé en casa
Con todo lo señalado, tener por fin al bebé en casa puede ser algo más fácil de llevar, pero antes que nada es importante que también disfrutéis de estos días, ya que pasan rápido y en definitiva, no se van a repetir.
Temas:
- Cuidados del bebé