Diccionario para primerizos. La R
Que tanto tú como tu pareja afrontéis el embarazo de la mejor manera posible, sin miedos, y que os preparéis adecuadamente para el parto y la llegada del bebé es lo que pretendemos conseguir en BabyAffinity con nuestra serie titulada Diccionario para primerizos. Y es que, a través de la misma, lo que hacemos es dar a conocer conceptos y términos fundamentales que posiblemente desconozcáis si vais a ser papás por primera vez, pero que os servirán para estar al día de todo lo que tiene que ver con la gestación.
En concreto, el artículo que tienes ahora delante es el que se refiere a palabras vitales que debéis saber y que empiezan por la letra R:
Reeducación del perineo
Bajo tan singular nombre se encuentra lo que sería el procedimiento de recuperación del perineo, después del pertinente parto. Y es que durante el alumbramiento tanto esa parte del cuerpo como la vagina en concreto sufren un estiramiento notable, para poder permitir la salida del bebé. Un estiramiento que luego puede derivar en distintas consecuencias como, por ejemplo, la incontinencia urinaria.
Por ese motivo, es vital que la ya mamá, después de haber dado a luz y siguiendo los consejos de su médico, proceda a facilitar la recuperación del perineo y la tonicidad de los músculos del mismo. ¿Cómo lo puede hacer? Mediante diversos ejercicios, a través de la electroestimulación…
Es importante saber que, en algunos casos, se puede requerir que la mujer pase por quirófano para poder alcanzar el mencionado objetivo si no consigue hacerlo por su propia mano.
Reflujo
Una de las palabras que más oirán en su día a día los adultos que acaben de tener un bebé es esta, que se emplea para referirse a la secreción del estómago que ese realiza. Se trata de una secreción que pasa por el estómago y que sube por el esófago y la garganta para salir a su exterior, fundamentalmente después de la comida.
El hecho de que en sus primeras semanas de vida su sistema digestivo aún no esté maduro es el principal responsable de que cualquier pequeño tenga reflujos, que son absolutamente normales. Eso sí, hay que estar vigilando a los mismos, ya que requerirán acudir al médico cuando sea excesivos, si van asociados a problemas respiratorios o si el menor está teniendo una severa pérdida de peso.
A todo eso se debe añadir que las embarazadas también pueden tener que hacerle frente a esta problemática, que se presenta como uno de los síntomas más habituales del periodo de gestación. En su caso, es debido a los cambios hormonales que experimentan sus cuerpos y se ve acentuada por la ingesta de comidas demasiado picantes y copiosas o por tomar bebidas con mucho gas.
Reproducción asistida
Este término es el que se emplea para referirse al conjunto de técnicas de fertilidad que se llevan a cabo con el claro objetivo de que una mujer pueda quedarse embarazada, cuando por el método natural le resulta difícil o imposible.
Entre las propuestas más significativas que se encuentran amparadas bajo ese término sobresalen estas:
-
Inseminación artificial, que consiste en depositar esperma directamente en el útero.
-
Fecundación in vitro, que se sustenta en un complejo proceso compuesto de varias fases: extracción de óvulos mediante punción, fecundación de los óvulos por espermatozoides realizada en el laboratorio e implantación en el útero.
-
Microinyección intracitoplasmática del espermatozoide (ICSI), que establece que el óvulo se fecunda mediante la citada microinyección de un espermatozoide determinado.
Ritmo cardíaco fetal
Este término se conoce dentro del ámbito médico con las siglas RCF y viene a definir al estudio y control que se realiza del ritmo del corazón del feto. Gracias al mismo se puede no sólo saber el estado de salud en el que se encuentra ese sino que además se puede conocer el bienestar del mismo.
Mediante un dispositivo que se coloca en el exterior del vientre de la madre es como se consigue saber la citada constante, que en el caso de los bebés suele ser de entre 120 a 160 pulsaciones por minuto.
Hay que ser conscientes de que en el momento en el que la mujer siente las contracciones que le indican que llega el bebé y se marcha al hospital, también el control del citado ritmo cardíaco fetal es fundamental. En el centro sanitario se comprobará este mediante lo que se conoce como monitorización, que sirve para dictaminar si el bebé está asumiendo de la manera idónea el parto. Si todo indica que es normal, se llevará a cabo el alumbramiento de forma natural, pero si los médicos comprobasen que hay alguna anomalía, tomarán la decisión de provocarlo en pro de evitar el llamado sufrimiento fetal, es decir, para no poner en peligro la vida del pequeño y, como consiguiente, la de su madre tampoco.