5 canciones tradicionales que encantan a los bebés
Igual que se recomienda que desde pequeños se les lean cuentos para que vayan desarrollando ciertas habilidades y empiecen a entusiasmarse por la literatura, también se aconseja que se les cante. La música ya les fascinará desde que están en el vientre materno y, después de nacer, también, ya que les ayuda a divertirse, a tranquilizarse cuando es necesario, a dormir cuando se trata de nanas e incluso a disfrutar de momentos únicos con sus padres.
Si tú tienes un bebé de tres meses, por ejemplo, es el momento de que aproveches los instantes que compartís para cantarle algunas de las piezas tradicionales que más gustan a los niños y que han pasado de generación en generación sin perderse. Se trata de canciones que formarán parte de su acervo cultural y que, conforme vaya creciendo, le ayudarán a vocalizar, a descubrir nuevas palabras e incluso a desarrollar su coordinación corporal al bailarlas:
1-“La Tarara”
Esta canción es de origen castellano y es una de las más antiguas que forman parte de la historia musical de España. Hay que destacar que fue el escritor granadino Federico García Lorca quien, en la década de los años 30, la recuperó a través de un poema y, desde ese momento, volvió a convertirse en la favorita de muchos pequeños.
El ritmo animado que tiene y la repetición constante de su estribillo y de ciertos monosílabos son dos de las razones que llevan a que le fascine a los bebés. No obstante, también a los niños más mayores, que la suelen cantar mientras juegan al corro.
2-“Que llueva, que llueva”
Otra de las canciones tradicionales que debes comenzar a cantarle a tu bebé de tres meses es esta, que está considerada un clásico de nuestra cultura. Así, desde bien temprano, descubrirá una composición divertida que, según la intensidad con la que se interprete, puede ser utilizada para entretenerse o bien como nana.
Tiene una letra muy corta y sencilla por lo que, cuando empiece a hablar, podrá aprenderla y así descubrir vocabulario relativo a la climatología.
3-“El patio de mi casa”
De generación en generación ha pasado también esta otra composición musical, que resulta muy divertida a los bebés, ya que permite que sus padres al cantarla puedan realizar todo tipo de cambios de tono y de gestos que les sacarán una sonrisa.
De la misma manera, hay que resaltar que en niños que ya andan y hablan es muy útil. En concreto, trae consigo las siguientes ventajas:
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Les ayuda a ampliar de manera notable su vocabulario.
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Se convierte en una herramienta muy eficaz a la hora de que comiencen a descubrir las letras que conforman el abecedario.
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No menos importante es que contribuye a que mejoren su coordinación y a que realicen ejercicio sin darse cuenta. Y que se canta jugando al corro, propiciando que no sólo tengan que girar sino también agacharse, correr, estirar los brazos…
4-“Cinco lobitos”
Una de las canciones que es más importante que empieces a cantarle a tu bebé es esta. Se trata de una composición tradicional de nuestra historia musical, que le ayudará a comenzar a realizar determinados movimientos con las manos y que contribuirá a que mejore de manera notable su percepción visual. Eso es debido a que te atenderá cuando muevas tu mano de un lado hacia otro, fijará sus ojos en esa acción y, en muy poco tiempo, incluso será capaz de imitarte. De ahí que le ayude a desarrollar ciertas habilidades motoras.
Cuando sea un poquito más grande, esta pieza además pasará a ser una herramienta muy útil de cara a que pueda aprender a contar del 1 al 5 y también a que descubra que hay una serie de hábitos que hay que realizar a diario. Con esto último nos estamos refiriendo a bañarse, peinarse o incluso acudir a la guardería.
5-“Los patitos”
Un gran estímulo para tu hijo será que también le cantes esta otra composición, incluida dentro de las más tradicionales. ¿Por qué? Porque le servirá para comenzar a descubrir ciertos movimientos corporales que, poco a poco, será capaz de realizar por sí solo y como imitación. Por ese motivo, se hace necesario que pongas todo tu arte en la ejecución de la letra, que llevará a que tengas que representar que estás nadando, llorando y moviendo el trasero.
Cuando sea algo más mayor, además, con la misma asimilará que hay que portarse bien, que hay que hacerle caso a mamá porque si no está le regañará.
“Al trote, al galope”, “Quisiera ser tan alta” o “Antón pirulero” son otras de las canciones que también forman parte de la tradición musical de nuestro país y que deben darse a conocer a los más pequeños para divertirse, entretenerse y aprender.