Una cajera rescata a un bebé antes de que la madre se caiga (VÍDEO)
Aunque, en ocasiones, realmente nos cueste creer en la humanidad de las personas, cambiamos de opinión cuando nos enteramos de casos como el que ahora se nos ha dado a conocer a través de diversos medios de comunicación a nivel mundial. Y es que nos vienen a dejar patente que no tenemos que ser tan incrédulos, que hay individuos que aún hoy se convierten en héroes al ayudar de manera absolutamente desinteresada a desconocidos con los que se topan y que necesitan su colaboración.
En este caso concreto, la heroína no es otra que la cajera de un supermercado que ha conseguido rescatar a un bebé antes de que su madre se cayera al suelo y sufriera un ataque de epilepsia.
¿Dónde ha sucedido?
En Estados Unidos, concretamente en Colorado, es donde se ha producido esta noticia. Más exactamente podemos decir que en un supermercado de la población de Arvada.
Los protagonistas
De manera indiscutible, tres son las personas que se han convertido en portadas de numerosos medios de comunicación:
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La cajera, que es la auténtica heroína de la historia y que responde al nombre de Rebecca Montano.
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La madre, que realizaba sus compras en compañía de su hijo y que sufrió el ataque epiléptico.
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El bebé, que afortunadamente no tuvo que hacerle frente a ningún daño gracias a la ayuda de la empleada del supermercado.
Los hechos
Estos pasados días, concretamente el día 16 de marzo, es cuando ha tenido lugar este hecho que nos ocupa y que da comienzo en una jornada normal en la que Rebecca se encuentra desempañando su trabajo de cajera en un supermercado de la mencionada ciudad.
Como ocurre día a día, realiza sus labores de la manera más normal, atendiendo con prontitud y eficacia a los clientes que se colocan a la cola para pasar por la caja. Y llega el turno de una joven madre que porta a su bebé en brazos y que va a efectuar la compra de un gaseosa.
La trabajadora mira al pequeño y al hacerlo pasa también la vista por la mamá de este y se da cuenta que no está bien. En apenas segundos comprende que algo le pasa porque, entre otras cosas, sus ojos rápidamente se entornan vidriosos. Por eso, viendo que la adulto va a desmayarse, va a sufrir un colapso, se acerca y le pide que le deje coger al niño, porque es la manera de que este no caiga y pueda hacerse daño.
La joven mamá, conocedora también de que no se encuentra bien y de que va a sufrir un ataque de epilepsia, hace caso a la cajera, le deja a su hijo en brazos para que pueda cogerlo y así evitar que se caiga y se haga alguna lesión. Así, la empleada toma al pequeño en su regazo mientras con la otra mano agarra a la adulto que comienza a convulsionar y que se cae al suelo.
En ese momento, la trabajadora del supermercado, mientras mantiene al menor a salvo, empieza a chillar para que así puedan acudir a prestarle ayuda. Y así ocurre, pues uno de los clientes se persona rápidamente y sale corriendo para conseguir la colaboración de más personas. Todo al tiempo que la trabajadora no duda en coger el teléfono y llamar al servicio de emergencias para que se presente una ambulancia y pueda atender convenientemente a la enferma.
Una auténtica heroína
La acción de Rebecca no ha pasado inadvertida para nadie en su ciudad y fuera de esta, ya que las cámaras del centro comercial en el que trabaja captaron perfectamente la escena y hoy esta se ha convertido en un viral.
Así, tanto sus jefes como la joven que sufrió el ataque de epilepsia y la sociedad en general, la califican de heroína. Y es que gracias a su rápida actuación no sólo se contó con la asistencia médica necesaria para la joven madre sino que se impidió que el bebé permaneciera en manos de su madre y pudiera haber sufrido una fuerte caída, que le hubiera podido llegar a causar incluso un severo traumatismo.
Muchos son los periódicos, televisiones y demás medios de comunicación digitales que se han puesto en contacto con Rebecca para entrevistarla respecto a todo lo que ha sucedido. Abrumada por ese protagonismo que está teniendo, lo único que ha podido dejar claro es que su actuación fue fruto de que “soy madre y abuela, preocuparse por los niños es un instinto”.
Por otro lado, hay que saber que la joven mamá que sufrió el ataque de epilepsia se encuentra en perfecto estado, fue atendida convenientemente y continúa con su vida normal al lado de su bebé, que también se halla muy bien gracias a la improvisada heroína que fue su cajera.