La escabechina sigue en la sanidad balear: Armengol excluye a 576 auxiliares administrativos por el catalán
El Govern ya ha expulsado de las convocatorias y las bolsas de trabajo a más de 3.000 trabajadores y candidatos
"La sanidad en Baleares no puede permitirse seguir rechazando a trabajadores por un certificado lingüístico"
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La purga de personal de la sanidad balear que no tienen el título de catalán sigue dejando víctimas por el camino. Si hace diez días la socialista Francina Armengol expulsó a 40 auxiliares de enfermería, ahora ha excluido a 576 auxiliares administrativos. Se trata de trabajadores que han sido rechazados para la constitución de la bolsa de trabajo temporal del IB-Salut.
La plataforma por la libertad lingüítica Mos Movem ha lamentado que se sigan produciendo estos vetos. Así, ha recordado que «la sanidad en Baleares no puede permitirse seguir rechazando a trabajadores por el catalán». En este sentido, ha destacado que todos los empleados son necesarios y que «esta persecución debe terminar». Y es que el Govern de Armengol ha defenestrado hasta el momento a enfermeras, celadores, médicos, administrativos. «Todo, por no contar con el título de catalán».
Si algo escasea en la sanidad balear son trabajadores. No se trata de un problema reciente, sino de un mal endémico al que no se le pone solución. La insularidad y el coste de la vida en Baleares es una de las causas, pero la otra es la obligación de tener un certificado lingüístico de catalán. En los últimos años, con Armengol y su tripartito al frente, esta segunda causa se ha convertido en motivo de exclusión.
Baleares vive una controversia que para la portavoz de Mos Movem, Belén García, «es vergonzosa y surrealista». «Falta personal en la sanidad y lo único que le importa a Armengol es si los trabajadores tienen o no un certificado de catalán que no es ni un requisito», ha criticado. García se refiere a que en 2018, el director del IB-Salut, Juli Fuster, corrigió unos errores en el Boletín Oficial de las Islas Baleares (BOIB) al decreto del 18 de noviembre de 2016. Dichas correcciones «sirvieron para especificar la baremación de los títulos». «En ese momento el certificado lingüístico deja de ser un requisito, para ser un mérito».
Cabe recordar que el decreto mentado lo aprobó el anterior pacto de izquierdas y establece que entre los requisitos para entrar en las bolsas de interinos está el conocimiento del catalán. Hasta la aprobación de dicho decreto, el conocimiento del catalán era un mérito, pero no un requisito. Se trata de una norma que afecta a todo el personal del sector sanitario, desde celadores hasta médicos y enfermeras. Ello ha generado constantes protestas del sindicato médico Simebal, sobre todo en esta época de crisis sanitaria.
Aunque en ocasiones se han hecho excepciones a este decreto, los ecosoberanistas de Més, socios de Armengol en el Govern, presionan para que se aplique la norma con mano de hierro. Así, los vetos siguen y no parece que el Govern tenga intención de ceder y negociar. En su lugar se prescinde de aspirantes a plazas del Servicio de Salud y Servicios Sociales.
Armengol ya ha expulsado de las convocatorias y las bolsas de trabajo a más de 3.000 trabajadores y candidatos. Eso sin contar a los que se han marchado. Belén García afirma que «hay déficit de personal en todas las categorías de la sanidad balear y de los Servicios Sociales. Hay plazas vacantes en los centros de salud y una gran demanda de trabajadores sociales debido a la situación de pandemia. «Todo ello por culpa de la obligatoriedad de estar en posesión del título de catalán».
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