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El alcalde socialista de Palma no ha pagado a los funcionarios la subida salarial prometida del 2,5%

  • Indalecio Ribelles
  • Redactor de OKBaleares, información local de Palma, social y política. Antes, redactor en EL MUNDO/ Baleares durante 20 años.

El alcalde socialista de Palma, José Hila, a 23 días de que acabe la presente legislatura y con la cesta de la compra desbocada en la capital balear, la más cara de toda España, no ha pagado a los funcionarios la subida salarial prometida del 2,5% para 2023.

A no ser que el candidato del PSOE a la Alcaldía de la capital balear en una maniobra electoralista lo haga en los días previos a los comicios municipales del 28M, será el gobierno que salga de las urnas el que tenga que hacer frente a un desembolso que no está incluido en los presupuestos municipales de 2023.

Como ya denunció este digital en el momento de la aprobación definitiva de las cuentas municipales para este último año de la legislatura, el gobierno de coalición de socialistas, independentistas de Més y Podemos no incluyó dentro del incremento presupuestario para este ejercicio la subida del 2,5% de las retribuciones de los empleados públicos prevista en el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado de 2023.

Por tanto, si nada lo remedia, será el próximo equipo de gobierno que surja de las urnas el que tendrá que hacer el pertinente ajuste millonario en el concepto y departamento que considere oportuno para abordar el imprescindible pago de las nóminas de los empleados municipales, primera de las herencias envenenadas que recibiría del actual equipo de gobierno.

Es más, el interventor ya advertía de que no había informe alguno del responsable del área de Función Pública o del Departamento de Personal que acredite que se ha presupuestado crédito suficiente para poder atender los gastos en materia de personal del presente ejercicio.

La existencia de un gobierno como el actual de tres partidos, cuyas concejalías funcionan como departamentos estancos, complicaba en este final de legislatura cualquier ajuste presupuestario que nadie estaba dispuesto a asumir, y más en un año electoral como el presente 2023.

El departamento Financiero del Ayuntamiento de Palma, sin embargo, contestaba a una alegación presentada en este sentido por el PP poniéndose de perfil, y afirmando que el hecho de que no esté previsto en el presupuesto inicial, «no implica que a lo largo del ejercicio se pueda realizar efectivo con efectos de 1 de enero de 2023 , y por tanto dar cumplimiento a lo que prevé la Ley 31/2022, de 23 de diciembre, Presupuesto Generales del Estado para el año 2023».

A este respecto, recordaba que la subida del 2,5%, y los posibles incrementos variables sin determinar el momento de su exigibilidad y estableciendo únicamente la fecha de efectos, se traduce en que para concretarla durante el ejercicio, el Ayuntamiento tendría que gestionar la habilitación del crédito necesario y suficiente para su desembolso.

Pero no sólo falta dinero para pagar las nóminas todo el año. En el capítulo II del presupuesto, el interventor también señalaba que los créditos iniciales del concepto suministro energía eléctrica, aunque experimenta un incremento significativo (16,34%) respecto a los créditos iniciales de 2022, del análisis del estado de ejecución del presupuesto corriente puede concluirse que «previsiblemente, será insuficiente para atender el gasto real atendiendo al incremento del coste de este tipo de suministro».