Así operaba una clínica estética clandestina de Algeciras: citas secretas y productos veterinarios
La propietaria, de origen magrebí, operaba utilizando productos sin control sanitario comprados en el mercado negro
La Guardia Civil anima a denunciar a los afectados por las secuelas de los tratamientos

La clínica estética desmantelada por la Guardia Civil captaba a sus clientes en redes sociales con precios de saldo y «citas secretas» en las que no se revelaba el lugar exacto del local hasta que la víctima llegaba a la zona próxima donde se ubicaba. Así operaba esta clínica ilegal de Los Barrios (Algeciras) donde se hacían tratamientos de estética sin titulación y con productos comprados en el mercado negro o de origen veterinario. La Guardia Civil ha detenido a su propietaria de origen magrebí y la clínica estética clandestina está clausurada.
La operación policial arrancó el pasado mes de octubre con una denuncia anónima en la provincia de Cádiz, cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de una supuesta clínica estética clandestina que se publicitaba exclusivamente a través de redes sociales, Instagram, ofreciendo tratamientos a precios muy reducidos y completamente fuera de mercado.
Con esa premisa se inició una investigación en la que los guardias civiles del Puesto de Los Barrios constataron que en dicho establecimiento se realizaban tratamientos estéticos sin que la titular del local contara con ningún tipo de titulación sanitaria ni con la preceptiva autorización administrativa para el ejercicio de esta actividad.
Clínica clandestina con «citas secretas»
Los agentes también comprobaron que la clínica no facilitaba su ubicación exacta a los clientes hasta que estos concertaban una cita previa con discreción. Los guardias sí localizaron la clínica clandestina de estética y pudieron verificar que el local se encontraba situado en una oficina del barrio de Guadacorte, en el término municipal de Los Barrios.
Tras obtener la correspondiente autorización judicial, se registró el local junto con Inspectores de Farmacia de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía. Durante el registro, los agentes comprobaron que, pese a no cumplir ninguno de los requisitos legales para el ejercicio de la actividad, el interior del local presentaba la apariencia de un centro médico autorizado.
Bótox y esperma de salmón
La titular de la clínica, que carecía de cualquier titulación sanitaria, administraba tratamientos estéticos mediante inyecciones cutáneas, toxina botulínica (bótox), esperma de salmón (polinucleótidos PDRN), ácido hialurónico y vitaminas, utilizando además productos sin control sanitario, adquiridos presuntamente en el mercado negro, lo que suponía un grave riesgo la salud de los pacientes.

Durante la inspección también se constató que el establecimiento tenía numerosas citas concertadas para el mes de diciembre, coincidiendo con el periodo de las fiestas navideñas.
Piden que denuncien a los afectados
Como resultado de la actuación, el local fue precintado y clausurado, interviniéndose numerosos medicamentos y utensilios empleados para la administración de los tratamientos, algunos de ellos fabricados para uso veterinario. La responsable de la clínica ha sido detenida como presunta autora de delitos contra la salud pública y de intrusismo laboral.

Desde la Guardia Civil de Algeciras, solicitan a los afectados que presenten las denuncias correspondientes y recuerdan que es necesario extremar las precauciones cuando se acude a este tipo de establecimientos con precios por debajo de mercado.