Los hoteles cueva de España más singulares para que tu escapada sea de lo más especial

Alojarse en hoteles cueva es una experiencia de la que todo el mundo debería disfrutar al menos una vez en la vida. Estos alojamientos aprovechan los recursos naturales, como la inercia térmica, para mantener un confort constante a lo largo del año, sin necesidad de aire acondicionado ni calefacción. Además, su construcción tiene un mínimo impacto ambiental y se integran perfectamente en el paisaje. Sin duda, una opción sostenible que ofrece numerosas ventajas.

En España, abundan las cuevas que se pueden visitar, pero son pocas las que ofrecen la oportunidad de pernoctar y disfrutar de una experiencia verdaderamente única. La variedad de hoteles cueva es muy amplia por todo el territorio nacional, con opciones para todo tipo de presupuestos. Desde alojamientos más asequibles hasta aquellos que ofrecen suites de lujo.

Los mejores hoteles cueva de España

En Belmonte, Cuenca, se encuentra el Hotel El Bálsamo, una casa solariega del siglo XVI convertida en un lujoso hotel de 5 estrellas. Destaca por su piscina termal excavada en una cueva, que ofrece aguas salinas a una temperatura constante de 34 °C. Con dos apartamentos y siete habitaciones, este hotel ofrece una experiencia única.

Situado en el desierto de Los Monegros, en Tardienta, Huesca, se encuentra el Hotel Cueva Tardienta. Este hotel está literalmente excavado dentro de una montaña, ofreciendo una experiencia única para sus huéspedes. Consta de 8 habitaciones distribuidas alrededor de un patio central, donde no falta ningún tipo de comodidad ni lujo. Desde televisores de plasma hasta bañeras con hidromasaje, grifería árabe, conexión wifi, minibar y suelo radiante en los baños, entre otras comodidades.

En la zona de Trevejos, al sur de Tenerife, se encuentra Cueva Los Almendros, una sorprendente muestra de arquitectura rural. Este encantador lugar consta de dos cuevas restauradas de origen guanche. En medio de la naturaleza, el alojamiento ofrece una piscina, una fuente natural con peces y plantas acuáticas, zonas de barbacoa y diversos rincones para disfrutar del entorno. Su ubicación en una atalaya permite contemplar paisajes espectaculares.

Ubicado en el desierto de Tabernas, el Hotel Cuevas del Zenete ofrece una experiencia auténtica y única. Sus cuevas restauradas conservan su encanto original mientras proporcionan todas las comodidades modernas que los huéspedes puedan desear. Además de ello, el hotel dispone de una piscina al aire libre para disfrutar del clima soleado de Almería y un restaurante que sirve platos tradicionales de la región.

Por otro lado, las Cuevas Rurales de Bardenas, ubicadas en las Bardenas Reales de Navarra, ofrecen un alojamiento exclusivo en un entorno semidesértico. Decoradas con elegancia y equipadas con todas las comodidades, estas cuevas brindan a los visitantes la oportunidad de disfrutar de una estancia excepcional en uno de los lugares más impresionantes de la Península Ibérica.

En los impresionantes paisajes de las Hoces del Río Júcar, cerca de Jorquera en Albacete, se encuentra el lujoso Hotel XUQ Lomas de Ruvira. Consta de once cuevas que ofrecen una experiencia única de alojamiento, donde los huéspedes pueden disfrutar de jacuzzis, zonas de relax y piscinas mientras admiran el hermoso entorno natural.

Las Casas Cuevas de Cazorla, que conservan el encanto andalusí, son una opción estupenda para hospedarse en el espectacular Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas. A pesar de estar inmersas en un entorno natural impresionante, estas casas ofrecen todas las comodidades modernas, ¡incluyendo wifi y piscina!

En la localidad de Guadix, dentro del Geoparque de Granada, se encuentran las Cuevas del Tío Tobas, un refugio natural perfecto para desconectar en plena naturaleza. Dormir en el interior de la tierra es una experiencia única que estas casas-cueva ofrecen, proporcionando un confort inigualable. Con un aislamiento térmico y acústico excelente, garantizan un descanso nocturno fresco y estable.

Casas cueva de Guadix

El barrio de las cuevas de Guadix es un testimonio único de la historia y la arquitectura en España y Europa. Con más de 2.000 viviendas distribuidas en 200 hectáreas, este barrio, cuyo origen se remonta al siglo XV, demuestra la capacidad del ser humano para adaptarse a las circunstancias adversas. Es de especial interés conocer la historia de las cuevas de Guadix y comprender su importancia a lo largo del tiempo.

En particular, las casas cueva en la zona de Guadix y sus alrededores surgieron alrededor del año 1452, poco antes de la Guerra de Granada y la Reconquista. Los moriscos, habitantes de la región durante la época del al-Ándalus, encontraron en estas cuevas una forma segura de seguir viviendo en su tierra sin levantar sospechas entre los cristianos.

Durante los siglos XV y XVI, hubo desplazamientos masivos de población morisca, y no fue hasta el siglo XVII que los repobladores llegaron de otras partes de la Península Ibérica para establecerse en el barrio de las cuevas de Guadix. Las últimas excavaciones masivas en cuevas se llevaron a cabo en los años 50 del siglo XX.