Surface Studio ¿el mata iMacs de Microsoft?

Hoy ha sido el gran día de Microsoft y, como se esperaba, la compañía ha presentado el rumoreado Surface “todo en uno” que se ha bautizado como Surface Studio y es verdaderamente uno de los productos más atrevidos que hemos visto en los últimos años. Si quieres, la idea puede decirse que parte del concepto “todo en uno” del iMac de Apple, pero tiene más parecido con los todo en uno táctiles de fabricantes como HP que no se han hecho muy populares, entre otras cosas, porque hasta ahora no había un sistema como Windows 10 hecho para dispositivos de este tipo. Así, básicamente, el nuevo Surface Studio es la máquina definitiva para crear en plataforma Windows 10: tienes la potencia de un ordenador de sobremesa, una pantalla de 28 pulgadas con resolución 4K UHD (3.840 x 2.160 píxeles) y que además es táctil… pero ahí la cosa no hace más que empezar.

Como decimos, la pantalla es táctil con diez puntos, pero es que además tiene soporte para el puntero de precisión de tipo Wacom que usan las Surface portátiles con 1.024 niveles de sensibilidad a la presión. Además, ha sido especialmente diseñada para ofrecer una gama de color elevada para trabajos de fotografía, vídeo o en cualquiera en que la fidelidad y respuesta de color sea crítica.

Lo siguiente que es importante es cómo se ha diseñado la peana y el soporte, de manera que con un sólo dedo puedes tumbar la pantalla y que el ordenador se convierta en una descomunal tableta para dibujar o para usar aplicaciones de modo táctil. Esto último es algo que también han explorado fabricantes como HP en sus todo en uno.

Si la cosa se quedase aquí, estaríamos hablando de un todo en uno táctil “vitaminado”, pero Microsoft se ha sacado de la manga un complemento que recuerda a algunos mandos de control programables que se usan con aplicaciones profesionales o al Griffin PowerMate USB, un mando de control USB que se puede usar con todo tipo de programas aunque es habitual en aplicaciones para vídeo o música como control de reproducción.

Este control giratorio es inalámbrico y no sólo se puede usar sobre la mesa sino que se puede colocar encima de la pantalla para tener un control físico adicional para todo tipo de aplicaciones, de manera que, por ejemplo en una aplicación gráfica se puede usar como un selector de color, para ampliar o reducir las imágenes, etc.

Windows 10 para creadores

Como puedes adivinar, Microsoft no sólo quiere dar en la línea de flotación de los usuarios creativos en lo que tiene que ver con el hardware sino que, en línea con la filosofía de Apple, va a buscar una mayor integración del sistema con las máquinas. Para ello, la compañía ha anunciado la nueva actualización Windows 10 Creators Update que saldrá a primeros de 2017 y que incluye herramientas como el rumoreado Paint 3D y que se espera añada también herramientas 3D a aplicaciones como Office 365.

En lo que se refiere a la construcción, el Surface Studio es una obra de arte de ingeniería fabricada en aluminio y con un aspecto impresionante aunque parece que la electrónica va integrada fundamentalmente en la peana. En el interior, la máquina equipa procesadores de sexta generación Intel Core i5 o i7, hasta 32 GB de RAM, sistemas gráficos GeForce GTX 965M con 2 GB de VRAM (en lo s modelos con Core i5) o GTX 980M con 4 GB de VRAM (en los modelos Core i7), y disco híbrido de 1 o 2 TB (se entiende que es un disco mecánico con un disco SSD funcionando de manera combinada). Además tiene cámara frontal de 5 MP con soporte para Windows Hello y una cámara posterior con resolución Full HD, sonido estéreo y micrófono diseñado especialmente para el asistente Cortana, conexiones inalámbricas, 4 puertos USB 3.0, ranura para tarjetas SD, conexión para pantallas mini DisplayPort y conexión de red Ethernet.

Como te puedes imaginar, con este despliegue de tecnología, el nuevo Surface Studio no podía ser barato y los precios van a estar entre los 3.000 y 5.000 dólares según las configuraciones, lo que significa que es hasta más caro que los iMac 5K de Apple que parten de los 2.200 euros (aunque pueden llegar a los 4.500 euros en sus configuraciones más potentes) y, evidentemente, ni son táctiles ni se tumban a modo de tableta.