El desgobierno socialcomunista exige unidad frente al coronavirus
Ante el descontrol de la crisis del coronavirus, el jefe de la oposición ha declarado que “hemos asistido a un desgraciado espectáculo de incompetencia y de desgobierno que ha generado preocupación y alarma social por parte de la población española. Después de haber asistido toda la opinión pública española al espectáculo lamentable del desgobierno por parte del sr. Sánchez, creo que ha llegado la hora de que el presidente del Gobierno comparezca en el Congreso de los Diputados para informar y dar explicaciones a los españoles de lo ocurrido durante estos últimos días y sobre todo, saber exactamente cuáles son las decisiones que se van a tomar para atajar esta crisis. El sr. Sánchez tiene que explicar y hacerlo además en el Parlamento, no ya sólo por obligación política sino también por el derecho que tienen los ciudadanos a recibir una información clara y solvente por parte de su presidente del Gobierno”.
Y añadió que las palabras que definen lo ocurrido son “desamparo, desvergüenza, descoordinación, desinformación, desgobierno, descontrol, en definitiva, una falta clara de autoridad por parte del Gobierno de España”. “Yo le pregunto al sr. Sánchez, ¿qué miedo tiene a comparecer en el Congreso?, ¿qué es lo que tiene que ocultar? Necesitamos políticos que no rehúyan los debates, que den la cara, que aclaren y den seguridad a los ciudadanos, que protejan a los profesionales de la sanidad pública y que no los responsabilicen de sus propios errores. Por eso le digo al sr. Sánchez que voy a pedir una y mil veces su comparecencia en el Congreso, para que rinda cuentas por la crisis del coronavirus”. El jefe de la oposición continuó diciendo que “ahora mismo la opinión pública lo único que exige de la política es la revisión de los protocolos, la dotación de recursos, la puesta en marcha de la información. En definitiva, autoridad sanitaria, autoridad política y Gobierno, que es ahora mismo lo que están echando en falta no solamente los profesionales, sino también la ciudadanía. Hay un desamparo, y eso es lo que criticamos, el desamparo, el desgobierno del sr. Sánchez y exigimos que se ponga solución de manera inmediata”.
Os suena? Hay que hacer muy pocos cambios en los entrecomillados: donde pone Sánchez, poned Rajoy y donde dice coronavirus, sustituidlo por ébola. Todas estas palabras las pronunció Pedro Sánchez en 2014 siendo jefe de la oposición, cuando España se enfrentaba a un único caso de contagio por ébola, el de la auxiliar de enfermería Teresa Romero, quien se recuperó en 15 días. No así su mascota, el perro Excalibur que tuvo que ser sacrificado por precaución ante multitudinarias manifestaciones y concentraciones que trataron de impedirlo. Un único contagio y ningún fallecido por ébola frente a los 1.622 contagios y 35 muertos por coronavirus que se contabilizaban en la mañana de este martes, con unas previsiones que nos advierten de que la falta de medidas de contención hará que en 10 días España alcance las cifras de contagio de una Italia que este lunes ya sumaba 7.985 casos y alrededor de 463 fallecidos.
El lunes, una vez celebradas las manifestaciones comunistas del 8 de marzo, Pedro Sánchez habló por primera vez sobre este tema para exigirle a la oposición “unidad, serenidad y estabilidad” para hacer frente a la crisis del coronavirus y anunció un plan de choque para paliar los daños económicos causados por la epidemia, con medidas que aún no tenía ni pensadas y que se concretarán “en unos días”. Una oposición responsable le devolvería ahora una por una sus palabras de 2014, porque la desvergüenza, la descoordinación, el descontrol, la desinformación y el desgobierno socialcomunista ha causado, esta vez sí, la histeria y el pánico en la opinión pública española que arrasa con las existencias de farmacias y supermercados. El ocultar todo este desastre no es responsabilidad sino complicidad criminal.