¿Sabes lo que es la energía distribuida?

El modelo de distribución de energía del siglo XX, consistía en grandes centrales eléctricas alimentadas con carbón, hidroelectricidad o gas, que generaba electricidad la que se distribuía a través de una red centralizada. En la actualidad todo ha cambiado, gracias al avance de la tecnología, agregando nuevas fuentes de generación de energía y flujos bidireccionales, conocida como energía distribuida. Los parques eólicos y solares a gran escala son un gran aporte en el suministro de energía. En Australia muchas casas ya cuentan con paneles solares en las azoteas, generando de esta forma su propia energía, la cual pueden almacenar con sistema de baterías domésticos. Esta energía distribuida está haciendo que cambie la forma de consumir electricidad, lo que permite a los usuarios reducir el consumo durante los períodos picos, para equilibrar la red.

¿Qué beneficios aporta la energía distribuida?

La confiabilidad ha surgido como resultado de una fuerte preocupación a medida que la red lucha por garantizar el suministro. Todo ello para satisfacer a la enorme demanda, en particular en las horas picos, cuando se necesita un costoso respaldo para mantener todas las luces encendidas.

La llegada de los recursos distribuidos energéticos (DER), es una fuente de energía descentralizada generada por la propia comunidad. Esta energía distribuida está cambiando la red. En la práctica, los recursos energéticos son unidades o sistemas de energía renovable, que se encuentran generalmente en casas o negocios para proporcionarles energía.

Otro nombre que se le da es “detrás del medidor”, porque la electricidad se genera o se suministra “detrás” del medidor de electricidad en el hogar o negocio.  Algunos ejemplos comunes de energía distribuida son las unidades solares fotovoltaicas en la azotea, almacenamiento de baterías y de energía térmica, vehículos y cargadores eléctricos. Así como también medidores inteligentes y tecnología de gestión de energía doméstica.

Los DER pueden incluir generación renovable y no renovable detrás del medidor, almacenamiento de energía, inversores (dispositivos electrónicos que cambian corriente continua a corriente alternada), vehículos eléctricos y otras cargas controladas (aparatos medidos por separado como sistemas de agua).

El caso de Australia, un ejemplo de energía distribuida

La energía distribuida está cambiando la forma en que Australia produce y administra la electricidad. Ya la energía no es generada por grandes centrales eléctricas centralizadas, ahora ya proviene de muchos lugares, entre ellos se pueden incluir millones de hogares y negocios.

También se espera que la demanda de DER en Australia crezca, y que para el año 2050 pueda contribuir hasta con un 45% de la capacidad de generación de electricidad.  Lo que traerá como consecuencia que las organizaciones responsables de administrar el sistema eléctrico tengan un desafío enorme para garantizar que todo funcione en conjunto y que la red eléctrica permanezca estable.

Soluciones de almacenamiento de energía y red

Las redes eléctricas son más dinámicas y complejas que nunca. Frente a las crecientes instalaciones de energía renovable que aportan energía a una infraestructura envejecida, el almacenamiento de energía se ha convertido en un foco importante.

¿Qué ayudas reciben los proyectos de recursos de energía distribuida?

En el año 2018, se estableció el Programa de Integración de Energía Distribuida (DEIP), que consiste en una colaboración de agencias gubernamentales, autoridades del mercado, industrias y asociaciones de consumidores con el objetivo compartido de maximizar el valor de la energía distribuida, de los clientes, para todos los usuarios de energía.

Este programa de integración de energía apoya el intercambio de información y la colaboración sobre cuestiones del DER, lo que permite un mayor conocimiento y acatar las reformas de interés de los clientes.

También el DEIP proporciona ayuda financiera para proyectos que demuestren el uso eficaz de los recursos energéticos distribuidos, para hacer la transición a una red segura y confiable con una alta proporción de energías renovables.

Otros aportes del llamado proyecto DER

• Con los proyectos del DER se busca la forma de evolucionar las redes eléctricas para resolver los desafíos asociados con la energía distribuida. Esto podría incluir: nuevos modelos o enfoques comerciales para realizar el valor potencial del DER y reducir los costos totales del sistema o mejorar la estabilidad del sistema.
• Tecnologías y técnicas para la seguridad cibernética en el contexto de DER. Proyectos y estudios que desarrollen conocimientos sobre la experiencia y el comportamiento del cliente. Productos y servicios basados en datos.
• Estudios y proyectos para explorar técnicas que permitan optimizar la capacidad de la red de distribución con DER, acercándose a un mercado que ofrezca los mejores resultados de la red.
• Proyectos que demuestren la integración y coordinación de cargas flexibles y DER agregados. Por ejemplo, modelos de centrales eléctricas virtuales, almacenamientos térmicos, edificios como recursos distribuidos y vehículos eléctricos que prestan servicios al sistema eléctrico.

Proyectos que avancen en los marcos regulatorios para maximizar el uso y la inversión en la infraestructura de red, que permita más energía distribuida. Por ejemplo, reforma de tarifas, evaluación de la capacidad de alojamiento de redes, entre otros.