Israel endurece su ofensiva contra Hamás mientras más de 150 españoles esperan turno para salir de Gaza
EE.UU. aboga por una tregua que Israel rechaza, aunque mantiene su apoyo a Tel-Aviv en su lucha contra el terrorismo palestino
Israel no admite tregua en la guerra defensiva que ha declarado a los terroristas palestinos de Hamás en su nido, la Franja de Gaza. Tel-Aviv ha rechazado de nuevo la idea de una tregua, un alto el fuego temporal de carácter humanitario por el que aboga su principal y mayor aliado, Estados Unidos. El presidente Biden mantiene su cerrado apoyo a Israel en su lucha contra el terrorismo de Hamás que el pasado 7 de octubre cometió la mayor matanza de civiles en suelo israelí: 1.400 muertos, 5.400 heridos y al menos 241 secuestrados que se llevaron a Gaza.
Lejos de aceptar la idea de una tregua, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha insistido en las últimas horas en que Israel va a seguir adelante contra Hamás «con todas nuestras fuerzas», salvo que los terroristas palestinos liberen a los 241 civiles que tomaron como rehenes.
Esto supone que la ofensiva sobre Gaza se mantiene, en una escalada militar con la que Israel aspira a acabar con Hamás. Y en Gaza siguen más de 150 ciudadanos con nacionalidad española que esperan turno para poder salir de un territorio que se está convirtiendo en trampa mortal de civiles, víctimas de los combates cruzados entre Hamás y las tropas israelíes.
Este viernes, la ministra española de Defensa, Margarita Robles, explicó que la evacuación de esos españoles –entre 150 y 170– depende de cuándo las autoridades israelíes y egipcias den la autorización para que puedan cruzar la frontera entre Gaza y Egipto.
Lentas evacuaciones
Los extranjeros que dejan Gaza lo hacen de forma lenta, escalonada. Son unos 7.000 los que esperan turno, de 60 nacionalidades distintas. El Gobierno de Sánchez sigue sin saber cuándo le tocará el turno a los españoles. El trámite depende de un permiso que otorga Israel, que se lo comunica a Egipto y es en ese momento cuando las autoridades egipcias se coordinan con las embajadas respectivas para que vayan a buscar a sus nacionales, que cruzan por el paso de Rafah.
El ritmo medio al que están saliendo civiles de Gaza a Egipto no llega a 500 al día. Este viernes se anunció que saldrían unos 400, en su mayor parte estadounidenses.
A la Casa Blanca le preocupa la situación por las consecuencias que está teniendo para los civiles atrapados en Gaza, pero también por la situación de los estadounidenses que se cuentan entre los rehenes que tomó Hamás cuando atacó enclaves israelíes, el 7 de octubre.
Para ello, Washington mantiene no sólo su apoyo a la guerra defensiva de Israel sino que está dándole apoyo militar. El Pentágono ha informado que está realizando vuelos de drones no tripulados sobre la Franja de Gaza para, en coordinación con el Ejército israelí, intentar localizar a los rehenes que tomó Hamás.
Descartada una tregua
El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, que este viernes visitó la capital israelí por tercera vez desde que comenzó la guerra, sigue abogando por un alto el fuego temporal, pero Israel considera que no es posible hablar de tregua mientras Hamás mantenga a esos 241 civiles cautivos. «Israel se niega a una tregua temporal que no incluya la liberación de nuestros rehenes», declaró este viernes Netanyahu. En esto hay discrepancias con la Casa Blanca. El mismo viernes, Blinken defendió el alto el fuego para garantizar la seguridad de los secuestrados, la evacuación de heridos palestinos y el envío de más ayuda humanitaria a los civiles de Gaza.
«Cuando se trata de la protección de los civiles, que están atrapados en el fuego cruzado creado por Hamás, se debe hacer todo lo posible para protegerlos», dijo el secretario de Estado de Biden.