Cómo podemos desenfadarnos fácilmente, según la ciencia

Las personas que suelen enfadarse y desenfadarse por costumbre, tiene estos dos problemas a diario, y nos siempre resulta fácil. Su mente entre en espiral y no son felices. Por esto si te pasa últimamente, entonces debes saber de qué forma podemos desenfadarnos, según la ciencia.
Se trata de averiguar cuál es el método científico para calmarnos cuando estamos más enfadados y mostramos nuestra ira.
Cómo desenfadarnos, según la ciencia
Hay varias investigaciones al respecto que nos dan soluciones para calmarnos más allá de mostrar nuestra ira.
Una de éstas es la que llevó a cabo un grupo de investigadores de la Universidad Estatal de Ohio, en Estados Unidos. Se concluyó que desahogarnos no es siempre la solución. La clave estaría en disminuir entonces la excitación fisiológica.
Debemos entonces realizar diversas actividades que nos hacen reducir este estado de ira que no conduce a ningún lugar y que , al contrario, puede aumentar nuestro estado de enfado y excitación.
Y de paso hacer que los demás todavía acaben estando también más enfados. Por esto hay que centrarse en las actividades que reducen la excitación.
Entre otros, se llegó a la conclusión de hábitos que podemos adoptar, como vivir el presente y la atención plena en cada cosa, además del yoga de flujo lento, o la respiración diafragmática que son realmente actividades efectivas para reducir nuestro malestar.
¿Hacer ejercicio?
Al contrario de lo que podamos pensar, pues el ejercicio siempre va bien para desestresarnos, resulta que hacer ejercicio cuando tenemos esta ira no es tan efectivo, según la ciencia.
Pues no reducir nuestra ira en ese momento, al contrario, ponernos a hacer ejercicio al momento, puede incluso incrementarla.
Con esto no quieren decir que el ejercicio deba dejarse de lado, es natural hacerlo a diario para estar más saludable por fuera y por dentro.
Ahora bien en este método se habla que hay ejercicios que involucran juego y diversión, y esto también puede frenar la excitación fisiológica del momento. Esto se explica porque entonces el ejercicio sí efectivo porque resulta placentero y nos divierte. Siempre que sea de esta forma entonces tiene sentido para reducir nuestra ira.
Más métodos: escribir en un papel
Hay más métodos que sirven para calmar nuestro enfado bastante rápido. Según otras investigaciones, hay que escribir en un papel nuestro enfado. Lo que nos pasa, lo que no, porque estamos así… y luego hay que tirar este papel.
Y al parecer es un método que funciona y que nos calma cuando nos sentimos así. Realmente es uno de los más curiosos y fáciles de hacer porque todos tenemos un papel y un boli, y somos capaces de volcar justo en ese momento lo que nos pasa.
Es como hacer un parón ante tanto enfado y posible grito para entender que todo ello nos puede dar más paz y nos calmará.
Dejar un tiempo: así desenfadarnos
La misma investigación de Estados Unidos que relatábamos al inicio también indica otros hábitos como dejar pasar un tiempo, un poco de espera, parar y pensar en otra cosa para que pase un tiempo prudencial sobre nuestro enfado. Entonces suele pasar que es algo que pierde interés y nos calmamos.
Comunicación asertiva
Otra manera es aprender a comunicar tus necesidades y sentimientos de manera asertiva, en lugar de agresiva o pasiva.
Todo esto puede reducir el enfado. Además incluye expresar tus pensamientos y sentimientos de manera clara y directa, sin menospreciar a los demás. Probarlo no cuesta nada así que ya puedes empezar.
Practicar la gratitud
Es algo que recomiendan muchas personas expertas en psicología. Establecen poder enfocarnos en lo positivo y agradecer por todas las cosas, esto permite reducir así los pensamientos negativos que alimentan el enfado.
Incluso se aconseja tener un diario de gratitud para anotar las cosas por las que estás agradecido.
Identifica posibles soluciones
Mayo Clinic también se pronuncia sobre este tema y concluye que, en lugar de concentrarte en lo que te hizo enfardarte, esfuérzate por resolver el problema en cuestión. ¿Te enfurece que la habitación de tu hijo esté desordenada? Cierra la puerta. ¿Tu pareja llega tarde a cenar todas las noches? Programa las comidas para más tarde en la noche.
O acuerda comer por tu cuenta algunas veces a la semana. Además, sé consciente de que algunas cosas están simplemente fuera de tu control. Intenta ser realista en cuanto a lo que puedes y no puedes cambiar. Recuerda que la ira no soluciona nada y solo podría empeorar todo.
Grandes dosis de humor
Podemos reconvertir la situación a través del humor. Es una técnica conocida para ayudarte a enfrentar aquello que te hace saltar tu ira al momento.
Claro que hay reglas, como evitar el sarcasmo, ya que puede herir sentimientos y complicar las cosas.
Tienes variedad de métodos para poder controlar tu ira y hacer que desenfadarte sea más fácil de lo que crees.