Cómo pintar platos a mano
¿Tienes platos viejos o que no usas pero tampoco los quieres tirar? Una buena idea puede ser quizás la de pintar un diseño que nos guste de modo que podamos convertir el plato en un elemento decorativo. Veamos entonces paso a paso, cómo pintar platos a mano de manera fácil.
De este modo puedes colocar tu plato decorado sobre un estante, o incluso los puedes pintar para cambiar el aspecto de tu vajilla de porcelana y de este modo, lograr sorprender a tus invitados con platos realmente bonitos e incluso, con diseños personalizados.
Materiales:
- Platos de cerámica blanca
- Pintura para porcelana o cerámica
- Rotulador a base de agua para porcelana
- Pincel de punta fina
- Pincel de bordes gruesos
Pasos para pintar platos a mano:
Pintar los platos a mano con los materiales enumerados es realmente fácil. A partir de aquí tú sigues con el diseño que más te guste, pero si no tienes claro qué dibujar puedes guiarte por lo que explicamos ahora:
- Comienza tomando el rotulador a base de agua y con la ayuda de una regla dibuja dentro del plato una cuadrícula de modo que deberás trazar líneas rectas, por un lado y por el otro de modo que el plato te quede dividido y con un diseño sencillo.
- Otro diseño puede ser pintar tan solo la mitad del plato con un color de pintura de cerámica o porcelana. Elige un color que combine con el color original del plato, o que sea completamente distinto.
- Puedes también dibujar con el rotulador un triángulo, haciendo coincidir la base de este con el borde del plato. Una vez hayas creado esa forma pintas el interior con la pintura de cerámica y ¡listo!. O puedes dibujar en el plato un rombo y pintas el interior o el exterior. Lo que tú prefieras.
- Si te gusta el dibujo y además se te da bien, otro modo de pintar platos a mano, es crear un diseño como por ejemplo unas flores, o puedes dibujar una cara o un rostro, quizás un animal. Para ello puedes utilizar el pincel fino, y crearás un diseño único que seguro que sorprenderá a todos.
- Por otro lado, al margen del diseño que hagas, debes permitir que la pintura se seque durante al menos 24 horas, y una vez pasado ese tiempo ya será posible superponer las decoraciones que desees añadir si así quieres. Es importante señalar también que tenemos que leer atentamente los tiempos de secado que se muestren en el frasco de pintura o el marcador. En general, lo normal es esperar 24 horas, luego tendremos que hornear el plato a 150 grados durante 35 minutos. De esta manera, tu decoración se volverá lo suficientemente resistente como para poder ir al lavavajillas.
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