Cartas

Cómo hacer un abanico con cartas

abanico con cartas
Los abanicos con cartas pueden hacerse a una o dos manos

Los juegos y trucos con naipes siempre han sido un pasatiempo muy entretenido, tanto para niños como para adultos. Saber hacerlos no es fácil, pero todo puede aprenderse. ¿Quieres saber cómo hacer un abanico con cartas? Sigue leyendo y descubre la forma de lograrlo con dos manos.

Si quieres hacer trucos con cartas, no cabe duda que debes saber hacer un abanico con ellas. Puede considerarse casi un arte, especialmente cuando después aprendes a abrir y cerrar ese abanico rápidamente para mover las cartas y que no se descubra el truco.

Pasos para hacer un abanico con cartas:

  1. Sujeta el mazo de naipes con soltura, entre el dedo pulgar izquierdo y los demás. La mano izquierda debe estar hacia afuera, como si estuvieras sujetando un vaso con agua, teniendo el pulgar más cerca de ti.
  2. Coloca ahora el mazo entre tu dedo pulgar y el índice, totalmente plano y hacia abajo. Pon el dedo índice y el medio contra el reverso del mazo, con la punta del dedo medio contra la esquina derecha del mazo.
  3. Cuadra los naipes ligeramente y sujeta el mazo con holgura. Desvía la parte superior del mazo de forma que las cartas superiores queden más hacia la derecha que los de debajo. Esto creará un ángulo que será de ayuda para que los naipes empiecen a crear un abanico uniforme.
  4. Crea el abanico con los naipes utilizando el dedo pulgar derecho, llevando ese dedo hacia el borde izquierdo del mazo y empujando con él las cartas para crear esa forma de abanico. Presiona ligeramente con el pulgar mientras lo haces, pero con suavidad para que los naipes puedan desplegarse y formar el abanico.
  5.  Aunque al principio te pueda resultar un poco complicado controlar tantas cartas y el movimiento solo con el dedo pulgar, lo cierto es que con la práctica conseguirás hacerlo de forma natural y sin ningún problema.
  6. Aunque tengas mucha práctica, no hagas los movimientos con el abanico demasiado rápido, deja que fluyan las cartas, que se pueda ver lo que haces aunque no con el detalle suficiente como para pillarte el truco.
  7. Una vez que tienes el abanico abierto, intenta cerrarlo solo con una mano. Es muy fácil hacerlo con la mano libre, llevando los naipes a la dirección original para volver a formar el mazo.

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