‘El Hormiguero’: Tamara Falcó pone en un aprieto a su hermano Enrique Iglesias

Tamara Falcó se ha convertido en la colaboradora estrella de ‘El Hormiguero’. La joven ha sido la auténtica nueva sensación de la nueva temporada del programa de Antena 3, compartiendo cada jueves divertidas anécdotas durante la tertulia que realiza junto a Pablo Motos y a otros colaboradores del programa, como Nuria Roca o Juan del Val.

Una vez más, Tamara Falcó ha vuelto a sorprender a los espectadores con un recuerdo familiar, que en esta ocasión ha tenido como protagonista a su hermano, el artista Enrique Iglesias. Un recuerdo que también ha sorprendido al equipo del programa, que están encantados con que la hija de Isabel Preysler se sienta cada vez más cómoda en el plató de ‘El Hormiguero’.

Durante la tertulia, comenzaron a hablar sobre uno de los temas clave de la semana: las medidas que habrá esta Navidad. Los colaboradores recordaron algunos momentos de navidades pasadas, y Tamara explicó que en su familia siempre se han vivido estas fiestas de una manera muy peculiar, ya que son muchos y de diferentes partes del mundo.

Tertulia de actualidad con @nuriarocagranel, @delvaljuan, Pablo Motos, @Tamara_Falco_ y @cristina_pardo #RaphaelEH pic.twitter.com/YLTXQgalpR

— El Hormiguero (@El_Hormiguero) November 26, 2020

«Por un lado están los Preysler, por otros los Iglesias y por otro los Falcó» explicó. Para más tarde contar una anécdota de su hermano, Enrique Iglesias, que tuvo lugar en la Nochevieja de 1987. “Me va a matar” dijo Tamara Falcó antes de contar lo que ocurrió aquella noche.

La colaboradora recordó entre risas el momento de ese año en el que Sabrina apareció en la televisión con su famosa canción ‘Boys, Boys, Boys’ y se le salió un pecho en mitad de la actuación.

Tamara explicó que en aquel momento su familia vivió un momento que jamás podrán olvidar: «Mi hermano salió corriendo hacia la tele y la abrazó». Todo ello mientras Isabel Preysler gritaba horrizada: «Enriqueeeee», confesó la colaboradora mientras que Pablo Motos y el resto del equipo estallaban de la risa.