¿Cuál es la mejor croqueta de jamón del mundo?
La mejor croqueta de jamón del mundo de este 2019 está en Toledo. Concretamente, la de Javier Ugidos, del restaurante Tobiko (Toledo).
Fina, suave, con cuerpo y con jamón. Cocinar croquetas es todo un arte y no siempre se consigue.
La mejor croqueta de jamón del mundo de este 2019 está en Toledo. Concretamente, la de Javier Ugidos, del restaurante Tobiko (Toledo) que resultó ganadora en el concurso sobre ello de Madrid Fusión.
Fue el ganador del V Campeonato Internacional Joselito a la Mejor Croqueta de Jamón del conocido evento. Fue la escogida por un jurado, formado por periodistas y cocineros de prestigio, y especialistas gastronómicos y del sector alimentario.
¿Qué se valora en un concurso de este tipo?
En tales concursos, un jurado realiza una cata a ciegas para valorar diversos aspectos clave que se tienen en cuenta a la hora de elaborar y comer una buena croqueta: bechamel, la fritura, la textura, la finura, el sabor y la calidad del producto elaborado.
¿Cómo es la mejor croqueta de jamón?
Es el secreto más bien guardado. Hay que resalta que una gran parte de la croquetas que quedaron finalistas en este concurso se cocinaron rebozadas con panko, un pan más grueso que el rallado tradicional que le otorga un toque más crujiente. Quizás el secreto podría estar en este pan.
El cocinero que la elaboró explicó que se basa en una receta tradicional y que también son importantes los productos que se utilizan, todos de alta calidad. La croqueta ganadora llegó en un recipiente de bambú. Esta croqueta suele estar en la carta del restaurante, así que ya es conocida por los clientes habituales y por otros que han visitado el local.
Más buenas croquetas
Álex Sampedro de El Recetario (Gijón), Víctor Membibre de Membibre (Madrid), Dani Frías de Pro-Bar (Santa Faz), Carlos Arias de Emma Gastrobar (Suances) y Ricardo Campos de Nolasco (Zaragoza) fueron los que quedaron finalistas en este concurso. Por tanto, presentan también croquetas dignas de ser probadas.
No es fácil hacer una croqueta que realmente sea esponjosa y suave por dentro y tenga ese crujiente que todos esperamos por fuera. Hay muchos condicionantes que marcan la importancia de este producto tan singular.