Iglesias celebra la absolución de Willy Toledo por sus insultos a Dios y a la Virgen: «Sentido común»

El juez considera que los mensajes publicados por el actor Willy Toledo en Facebook quedan amparados en la libertad de expresión

Podemos
El vicepresidente Pablo Iglesias. Foto: EFE

El vicepresidente Pablo Iglesias ha celebrado la absolución del actor Willy Toledo del delito de ofensa a los sentimientos religiosos. «Sentido común», ha escrito el líder de Podemos en su perfil en la red social Twitter.

Toledo, según la sentencia del Juzgado de lo Pensl número 26 de Madrid, actuó avalado por la libertad de expresión cuando publicó en su cuenta de Facebook varios mensajes en los que insultaba a Dios y a la Virgen. Según la sentencia, no queda acreditado que esos mensajes constituyan por sí mismos la comisión de un delito contra los sentimientos religiosos.

La sentencia sí señala que dichos comentarios constituyen una «falta de educación, mal gusto y lenguae soez» y añade que eso es algo «que caracteriza sus publicaciones».

Se trata de la respuesta a la denuncia de la asociación Abogados Cristianos, por los mensajes que Toledo publicó en Facebook en 2015 y 2017. La asociación pedía 22 meses de multa. Por su parte, la Fiscalía y la defensa pedían la absolución, al considerar que los comentarios se encontraban amparados en la libertad de expresión.

El 12 de octubre, Toledo publicó «me cago en la Virgen del Pilar», además de otros comentarios sobre la fiesta nacional, la monarquía y sus monarcas, el descubrimiento y la conquista.

«Es decir resulta evidente que su objetivo no era la crítica u ofensa de los sentimientos religiosos, sino la Fiesta del doce de octubre y todos lo que implica la misma», subraya la sentencia.

Durante el juicio, el autor manifestó que «no quería ofender a nadie, que solo quería expresar sus sentimientos y opiniones, ejercitar su derecho a la libertad de expresión».

Por otra parte, el Juzgado concluye que el actor tampoco cometió un delito de obstrucción a la Justicia. Durante la fase de instrucción, Willy Toledo fue llamado a declarar en tres ocasiones.

Tras no acudir a las dos primeras citaciones por considerar que no había cometido «delito alguno» sino que había «ejercido su libertad de expresión», el pasado 12 de septiembre fue detenido por la Policía para asegurar su comparecencia en los juzgados.

«La incomparecencia de los acusados o investigados durante la instrucción o durante la sustanciación del juicio oral no pueden ser constitutivos de un delito de obstrucción a la justicia», dicta la sentencia.

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