Sánchez oculta que el turismo dispara los contagios en las grandes capitales europeas igual que en Madrid

Pedro Sánchez
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su despacho de Doñana.
Carlos Cuesta

Pedro Sánchez ha decidido cargar contra Isabel Díaz Ayuso y culparla de los contagios en España por coronavirus. Pero el presidente oculta intencionadamente que todas las grandes capitales están registrando tasas de incremento de los contagios similares y no por motivos de mala gestión.

El liderazgo aeroportuario, el fuerte movimiento turístico y la centralización de los viajes empresariales y económicos es lo que, por motivos obvios, dispara los contagios en todas las grandes capitales. El análisis de la evolución del Covid-19 por regiones en Europa muestra que la incidencia del virus se está produciendo en las que tienen mayor peso económico y en los lugares turísticos. No pasa sólo en España ni mucho menos. Pasa en todas partes.

Madrid muestra en estos momentos una incidencia del virus de 473 casos diagnosticados en los últimos 14 días por cada 100.000 personas. Pero en el momento de tomar los datos para la realización de esta comparativa, su dato se situaba en los 200 casos.

Pues bien, en Alemania, por ejemplo, los datos demuestran que la mayor incidencia se está dando exactamente igual en los motores económicos y en la capital. De ese modo, Baviera (con el 18% del PIB alemán) es el länder con mayor incidencia: 445,7 casos por cada 100.000 habitantes. 
Berlín (4,3% del PIB, pero la ciudad más emblemática del país a efectos turísticos) está en los 316,3 casos por cada 100.000 habitantes y se sitúa ya como el sexto länder con mayor incidencia. 
Además, la región donde se sitúa Frankfurt (Hesse) también tiene una incidencia notable: 252,6 casos por cada 100.000 habitantes.

En Francia el caso es similar. La incidencia del virus en el país galo está siendo menor que en España, pero el pasado 14 de agosto el Gobierno declaró París “zona roja” de nuevo por el aumento de casos. La incidencia del virus se centra igualmente en la capital (y regiones adyacentes) así como en las zonas de mayor afluencia turística.

En Italia, el Covid-19 se concentra en los motores económicos del país. Milán (1.001,6 casos por cada 100.000 habitantes), Piamonte (759,7 casos por cada 100.000 habitantes) y Liguria (712,9 casos por cada 100.000 habitantes) son las regiones más afectadas.

Lazio por el contrario, mantiene unos registros de 195,6 casos por cada 100.000 habitantes y es la más afectada dentro de la zona centro y sur del país, un área menos desarrollada desde el punto de vista económico.

En Reino Unido se repite el esquema. Tres de las cinco ciudades con mayor incidencia del coronavirus se encuentran en la región North West, la segunda más importante en términos de PIB (13% PIB). Burnley registra 855 casos por cada 100.000 habitantes; Blackburn, 1.241 casos por cada 100.000 habitantes; y Manchester: 843 casos por cada 100.000 habitantes. Y Londres tiene una incidencia igualmente elevada: 434 casos por cada 100.000 habitantes.

Pero todo ello no le importa a Pedro Sánchez. Porque el presidente considera clave la ofensiva contra Isabel Díaz Ayuso para culparla del coronavirus en España. De hecho, como ya ha publicado OKDIARIO, el portavoz José Cepeda ha recibido el encargo de tomar el liderazgo mediático sobre Ángel Gabilondo para incrementar el ataque a la presidenta madrileña.

El Gobierno socialcomunista de Pedro Sánchez ha dado orden de disparar su ofensiva contra el Ejecutivo autonómico de Ayuso. Madrid es para el Ejecutivo una pieza esencial y la consigna es clara: derribar al Gobierno regional del PP, que se ha convertido en firme oposición de la izquierda gobernante. Y para ello necesita generar la imagen de que el avance del coronavirus en la segunda ola es culpa de Ayuso y de nadie más.

Y para esa función, el máximo responsable socialista y presidente de España no confía en la capacidad mediática de Gabilondo. Un motivo por el que los principales encargados de esa ofensiva serán José Cepeda y Pilar Sánchez Acera.

Las recientes declaraciones de Fernando Simón -posteriormente rematadas por Pedro Sánchez- cuestionando la gestión de la Comunidad de Madrid en la crisis del coronavirus se enmarcan dentro de esa estrategia de acoso y derribo planificada por el Gobierno, que ha convertido a Ayuso en el principal enemigo a batir.

Hay que recordar, como informó OKDIARIO, que ya el delegado del Gobierno en Madrid y secretario general del PSOE en la Comunidad, José Manuel Franco, dejó claras sus intenciones de acabar con la presidenta madrileña e instó a los alcaldes socialistas a movilizarse contra ella utilizando todos los medios a su alcance.

En ese sentido, Franco llegó incluso a denunciar al Gobierno madrileño por el acto de clausura provisional del «hospital milagro» de Ifema, argumentando que no se habían respetado las medidas de distanciamiento social. Todo un sarcasmo si se tiene en cuenta que fue Franco quien permitió, en plena extensión de la pandemia, la multitudinaria manifestación feminista del 8-M, que se convirtió en una bomba biológica.

La  fiscalía de la Audiencia Provincial de Madrid decidió archivar las diligencias abiertas tras la denuncia de la Delegación del Gobierno, dejando así en evidencia el clamoroso sectarismo socialista.

Sin embargo, el Gobierno socialcomunista ha dejado claro que Madrid es su gran obsesión y que no va a reparar en medios para tratar de conseguir su propósito, aunque sea recurriendo a la mentira.

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