Sánchez dice que la postura de España sobre Israel «es clara» pero Belarra sigue sin condenar a Hamás

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha asegurado este sábado que «la posición de España está completamente clara» en el conflicto entre Israel y Hamás mientras la ministra Ione Belarra ha publicado este mismo día un artículo en el que le insta a promover «sanciones ejemplares» contra el Estado israelí. Belarra sigue sin condenar explícitamente los ataques terroristas de Hamás.

Durante su intervención en la cumbre de líderes mundiales en Egipto, Sánchez ha afirmado que «la posición de España» sobre el conflicto entre Israel y Hamás está «completamente clara», en alusión al documento pactado hace unos días por los 27 miembros de la Unión Europea, en el que expresan su postura común ante el conflicto. En esa declaración, los Estados condenan «los brutales e indiscriminados ataques terroristas de Hamás», aunque incluyen en sus postulados la defensa de los civiles palestinos, y advierten que «no hay justificación para el terror».

Asimismo, reconocen que «Israel tiene el derecho a defenderse», si bien matizan que debe hacerse «en línea con el derecho Humanitario e Internacional», la misma precisión que ha realizado Sánchez.

«Necesitamos proteger a todos los civiles. Repito. A todos los civiles», ha insistido el socialista, mencionando que «los que son rehenes deben ser liberados sin condiciones e inmediatamente, y los que sufren el horror en Gaza debe recibir ayuda».

Sánchez ha enfatizado que «si la comunidad internacional no actúa, la situación puede empeorar drásticamente».

En este contexto, ha apuntado a tres «prioridades»: «Proteger a la población y garantizar el acceso humanitario a Gaza», permitiendo «ayuda humanitaria accesible que satisfaga las necesidades de la población», un «alto el fuego humanitario» y la liberación de los rehenes secuestrados por Hamás «sin condiciones».

El presidente en funciones, que no ha viajado aún a Jerusalén, al contrario de otros líderes mundiales, ha reiterado «el derecho de Israel a defenderse», pero con límites, como la protección de los civiles.  «Este conflicto no puede convertirse en una crisis regional. Una chispa puede desencadenar un incendio», ha advertido.

Sánchez ha abogado por «ofrecer al pueblo palestino e israelí una perspectiva creíble para la paz que ha de pasar por la creación de dos Estados para que ambos puedan existir de forma pacífica».

La cumbre ha sido convocada por el presidente egipcio para abordar la actual situación en la región y la aguda crisis humanitaria en Gaza, así como el futuro de la causa palestina y el proceso de paz, según ha precisado Moncloa en un comunicado, que enmarca esta cita en el esfuerzo para «movilizar a la comunidad internacional con el objetivo de frenar la actual espiral de violencia y buscar soluciones al conflicto». El presidente socialista ha viajado acompañado por el ministro de Exteriores, José Manuel Albares.

Belarra contra Israel

Precisamente, este mismo sábado, la ministra en funciones de Derechos Sociales y líder de Podemos, Ione Belarra, ha reafirmado la línea de su partido sobre el conflicto, que ha provocado una colisión con sus socios de Gobierno.

Sin condenar en ningún momento a la organización terrorista Hamás, Belarra ha reclamado «sanciones económicas ejemplares» al Estado israelí y ha pedido a los dirigentes reunidos en Egipto que «frenen el genocidio».

«La situación es desesperada y no caben reuniones cara a la galería. Necesitamos que la cumbre internacional de hoy sea lo que nunca son estos encuentros: operativa», afirma la líder de Podemos en un artículo publicado en Diario Red.

Belarra pide a los líderes mundiales que «suspendan la venta de armas a Israel, inmediatamente, hoy» y «apliquen sanciones económicas ejemplares, que Netanyahu y su Gobierno no pueda mover un solo dólar o euro de sus cuentas en el extranjero».

Igualmente, está convencida de que los líderes internacionales «pueden obligar» a Israel a un alto al fuego, a que se le exija que restablezca el agua y la luz y que, si estas «exigencias» no funcionan, los países pueden aplicar mecanismos disuasorios que los impuestos al presidente ruso Vladimir Putin por la guerra en Ucrania.

Las afirmaciones de Belarra desde que se desató la nueva ola de violencia por el ataque perpetrado por Hamás contra Israel han recibido la respuesta de la Embajada israelí que esta semana, en un comunicado, reclamó a Sánchez que condene «inequívocamente» las «vergonzosas declaraciones» de algunos miembros de su Gobierno que han optado por «alinearse con el terrorismo» de Hamás.

En la nota oficial se sostenía que esas declaraciones, aunque sin citar a ningún miembro del Gobierno en concreto, «no son sólo absolutamente inmorales, sino que también ponen en peligro la seguridad de las comunidades judías de España, exponiéndolas al riego de un mayor número de incidentes y ataques antisemitas».

Belarra ha llegado a pedir a Sánchez que solicite a la Fiscalía de la Corte Penal Internacional que se investiguen los «crímenes de guerra cometidos por Benjamin Netanyahu».

El socialista ha evitado desautorizar a la ministra por esos ataques a Israel. Moncloa se limitó a responder a la Embajada rechazando «tajantemente las falsedades vertidas» y avisando que no acepta «insinuaciones infundadas» sobre los miembros del Ejecutivo. «Cualquier responsable político puede expresar libremente posiciones como representante de un partido político en una democracia plena como es España», se destacaba en el comunicado de respuesta, emitido por Exteriores.