Los Reyes asisten al funeral por las víctimas de las inundaciones de Mallorca

Los Reyes Felipe y Letizia asistirán este miércoles en Manacor (Mallorca) a la misa funeral por las víctimas de las inundaciones en el Levante mallorquín, han informado fuentes de la Casa del Rey.

La misa la presidirá el obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, a las 19.00 horas en la Parroquia de Nostra Senyora dels Dolors de Manacor. Como consecuencia de las inundaciones, doce personas han muerto y aún se busca a un niño desaparecido.

12 muertos y un desaparecido

Los Reyes ya se desplazaron al municipio de Sant Llorenç des Cardassar, muy afectado por las graves inundaciones, el pasado viernes, después de la recepción con motivo de la Fiesta Nacional. Tras su visita, el Rey manifestó su «enorme orgullo» por la solidaridad «impresionante» de los miles de voluntarios que acudieron a ayudar.

Especialistas de la Unidad Militar de Emergencias, la Guardia Civil y Bomberos de Mallorca continúan las tareas de búsqueda del niño desaparecido en la torrentada del Levante de Mallorca.

El rastreo se lleva a cabo en varias zonas del torrente de Ses Planes: el tramo próximo a Son Carrió, donde se encontraron efectos personales del pequeño, y el área de la desembocadura del cauce en S’Illot.

Se busca en el mar al niño desazparecido

Artur, nacido en 2012, desapareció hace ocho días cuando el vehículo en el que viajaba junto a su madre fue arrastrado por el aluvión de agua, fango y residuos de todo tipo que produjeron las lluvias torrenciales vertidas en un par de horas sobre el torrente.

La madre, hallada muerta en el coche al día siguiente, había conseguido sacar a su hija mayor del turismo antes de que fuera arrastrado.

Las lluvias torrenciales del martes 9 de octubre en la comarca del Levante de Mallorca, con registros superiores a 250 litros por metro cuadrado, han dejado, por el momento, doce víctimas mortales, seis españoles, tres alemanes, dos británicos y una holandesa.

Cientos de familias y empresas han sufrido graves daños en sus propiedades y diferentes infraestructuras públicas han quedado destruidas en la mayor catástrofe natural de la historia reciente de Mallorca.