El responsable de las cargas policiales de Barcelona fue apartado en 2012 por el desalojo del 15-M

El intendente de los Mossos d’Esquadra, Antoni Antolín, se reincorporó hace unas semanas a su puesto actual, como jefe operativo de planificación de los antidisturbios de la Policía catalana. Para Antolín, esa responsabilidad no es nueva, pues ya en 2012 estuvo al frente de esta misma área. Desde ese cargo, dirigió el desalojo de los indignados de la Plaza Cataluña.

Precisamente por cómo gestionó aquel desalojo-durante el que una mujer quedó herida por un impacto de bala de goma que condenó al Govern a indemnizarla- la dirección de los Mossos lo relevó como responsable de la Brigada Móvil (BRIMO), la unidad encargada de la seguridad de grandes eventos y manifestaciones.

Con la llegada del nuevo consejero del Interior, Miquel Buch, y la reestructuración de la cúpula policial, encabezada por Miquel Esquius, Antolín ha recuperado su puesto al frente de una de las unidades más polémicas del cuerpo policial.

Precisamente el de este sábado era el primer dispositivo de calado que dirigía el nuevo jefe de la BRIMO, que se ha saldado con varias cargas policiales, alguna de las cuales de forma indiscriminada contra los transeúntes.

La actuación de los Mossos  ha abierto un nuevo frente dentro el Govern. Un diputado de ERC ha pedido la dimisión del consejero de JXCat a través de las redes sociales. También la CUP ha solicitado la dimisión de Buch y del presidente de la Generalitat, Quim Torra, bajo la amenaza de que “lo pagaréis”.