Pedro Sánchez toma posesión como presidente del Gobierno sin Biblia ni crucifijo
A las 11:03 horas de este sábado, Pedro Sánchez Pérez-Castejón ha prometido el cargo como presidente del Gobierno ante el Rey, Felipe VI, en el Palacio de La Zarzuela. El séptimo jefe del ejecutivo ha optado por hacerlo ante la Constitución pero sin simbología religiosa, es decir, sin Biblia ni crucifijo, algo que es posible hacer desde julio de 2014.
En el acto ha estado presente Mariano Rajoy, cesado tras no superar la moción de censura. La ceremonia, perfectamente pautada, ha tenido lugar en el Salón de Audiencias con las principales autoridades del Estado. Entre ellas, la presidenta del Congreso, Ana Pastor, el del Senado, Pío García Escudero, el del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas, y el del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes.
Rafael Catalá, exministro de Justicia, ha ejercido de notario mayor del Reino para dar fe del acto.
Hasta ahora, los anteriores inquilinos de la Moncloa tenían la opción de jurar o prometer el cumplimiento de sus obligaciones, pero debían hacerlo ante la Carta Magna y los símbolos religiosos colocados en la mesa instalada en la sala.
En el caso de Adolfo Suárez, Leopoldo Calvo-Sotelo, José María Aznar y Rajoy, prefirieron el juramento para expresar fidelidad al cargo, mientras que Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero se inclinaron por la promesa.
Sánchez se define como ateo y siempre ha sido firme defensor de que España sea un estado laico, de retirar la religión de los colegios públicos y de revisar el Concordato con el Vaticano.
Al término de la promesa, el Rey ha saludado a Sánchez para darle su enhorabuena y posar ante los medios gráficos. A continuación, se ha incorporado a la foto Rajoy y el resto de autoridades.
El líder del PSOE ha dado dos pasos para estrechar la mano de Rajoy ante Felipe VI. «Mucha suerte», ha deseado el presidente del Gobierno saliente a su sucesor.