Iglesias se niega a bajarse del coche oficial: rechaza en el Senado renunciar a su aforamiento

El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, ha evitado este jueves en el Senado no ya dimitir, algo que rechazó a primera hora en una entrevista en Rac1, sino también renunciar a su condición de aforado como gesto simbólico tras ser acusado por el juez de tres delitos en el caso Dina-Iglesias y después de que algunos miembros de su partido sí lo hicieran en el pasado en sintonía con los postulados defendidos por Podemos.

En una comparecencia en la Comisión para las Políticas Integrales de la Discapacidad en el Senado, a donde ha llegado en su coche oficial, Iglesias ha ignorado sendos emplazamientos de PP y UPN para que renuncie a su condición de aforado, conforme al programa electoral de la formación morada donde prometió cargarse esta prerrogativa por ser un «privilegio judicial».

La senadora del PP Violante Tomás Olivares ha señalado que «nos hemos quedado extrañados de verle hoy a usted aquí, ya que pensábamos que tendría decencia política y habría dimitido. Estamos sorprendidos de que esté usted aquí. Al hecho de su partido esté imputado por financiación irregular, se suma ahora que el juez pide al Supremo que le impute por tres delitos: revelación de secretos, con el agravante de género, algo my grave, daños informáticos y denuncia falsa», ha señalado Violante Tomás.

«Es sorprendente de que usted se refugie en la condición de aforado, cuando usted decía en su programa electoral que iban a suprimir los aforamientos. Supongo que ya si eso en otra legislatura. ¡Qué incoherencia y qué decepción para quienes creían en sus palabras y le ven ahora aferrado al sillón de vicepresidente!», ha subrayado la senadora del PP.

Así mismo, y sobre el objeto de la comparecencia, Violante Tomás ha criticado que Iglesias haya tardado nueves meses en acudir a esta comisión y le ha reprochado que su ministerio quiera recortar recursos a las ONG estatales de acción social que se trabajan con este colectivo, como ha denunciado el Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI).

«Como un ciudadano de a pie»

Por su parte, el senador de UPN Alberto Catalán Higueras también ha exigido a Iglesias que «dimita y haga frente a sus responsabilidades como un ciudadano de a pie», renunciando a su aforamiento. «Así daría ejemplo porque después de este auto su credibilidad es nula», ha recalcado Catalán, que también ha afeado al vicepresidente que su Gobierno pretenda eliminar los centros de educación especial. También Ciudadanos Tomás Marcos ha pedido a Iglesias que dé un paso a un lado y abandone el Gobierno al llegar su caso al Supremo.

En su turno de réplica, el ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030 ha eludido en todo momento referirse a su aforamiento y ha pasado al contraataque contra la oposición afirmando que «cuando el Tribunal Supremo se pronuncie (sobre su caso), ustedes se callarán y esperarán hasta el siguiente ‘escándalo’. Son inteligentes para saber lo que dirá el Tribunal Supremo», ha espetado Iglesias a los representantes de PP, UPN y Ciudadanos, dando por hecho que el Supremo no atenderá la petición del juez y no pedirá el suplicatorio al Congreso para investigarle.

En un momento de su intervención, Iglesias ha lanzado al Grupo Popular: «Tengan ustedes la decencia de no gritar desde la bancada cuando un vicepresidente está en el uso de la palabra», ha proclamado despectivamente.

«Yo les entiendo, porque los cambios que se están produciendo, les dejan en una posición muy complicada. Cuando digo que no van a volver al Consejo de Ministros, igual me puedo equivocar, pero ustedes son inteligentes para analizar las dinámicas electorales. La foto de Colón les va a tener confinados muchísimos años. En este país si no se ilegalizan formaciones, es casi inviable que vuelvan al Consejo de Ministros», ha subrayado Iglesias en alusión a los socios nacionalistas, separatistas y proetarras del Gobierno socialcomunista.

«Lo que anunciamos ayer -en alusión al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Ejecutivo que dispara el gasto un 54%- es una enmienda a la totalidad a todas sus políticas económicas, a las de Rodrigo Rato, a la respuesta de Europa a la crisis de 2008. Una modernización que les va tener fuera de juego. Ustedes acuden a medios no legítimos porque saben que por la vía electoral no van a volver al Gobierno», ha incidido Iglesias, deslizando así un velado ataque al Poder Judicial.

«Imposible»

Horas antes, en declaraciones a Rac1, el líder de Podemos aseguró que no concibe «ni como mera hipótesis» el que pueda ser imputado en el caso Dina-Iglesias, sosteniendo que «todo el mundo sabe lo que va a decir el Supremo».

«Es absolutamente imposible, no va a ocurrir», sentenció tras ser preguntado sobre si el Tribunal Supremo pudiera acceder a la petición del juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón para que se le investigue por los delitos de revelación de secretos con agravante de género, daños informáticos y denuncia falsa.

Lo contrario, manifestó Iglesias, que forma parte de la comisión delegada del Gobierno que controla el CNI, sería una «vulneración de derecho sin parangón», afirmó.