MINISTERIO DEL INTERIOR

Marlaska repliega tras las elecciones el avión que envió al Estrecho para vigilar las narcolanchas

La aeronave es como la que el Gobierno envió a Mauritania para que Sánchez se hiciese una foto

Marlaska repliega tras las elecciones el avión que envió al Estrecho para vigilar las narcolanchas
Fernando Grande-Marlaska.
Pelayo Barro

El Ministerio del Interior de Fernando Grande-Marlaska dio orden de desplegar en el Estrecho y Mar de Alborán la pasada semana, en plena recta final de la campaña de las europeas, un Cuco. Un avión de vigilancia CN-235 del Servicio Aéreo de la Guardia Civil que estuvo operando en misión contra el narcotráfico y la inmigración ilegal durante unos días hasta que, pasado el domingo de las elecciones, recibió orden de poner rumbo hacia su base de Madrid el mismo lunes a primera hora. Es el mismo avión que Interior desplegó en Mauritania durante 5 días y mandó de vuelta a Madrid una vez que Pedro Sánchez terminó su gira oficial al país africano junto a la presidenta de la Comisión Europea, Ursual Von der Leyen.

Pasaban unos minutos de las 9 de la mañana de este lunes cuando el CUCO502 enfilaba la pista de la base aérea de Morón y ponía rumbo al Estrecho para su última vigilancia del Mediterráneo, aprovechando que su orden de vuelo tenía como destino final la base de Torrejón de Ardoz. Se terminaba así una semana de misión de rastreo de pateras y narcolanchas, que se activó justo en plena semana de la campaña electoral.

«Hacía muchísimo tiempo que no lo veíamos por aquí, no parece coincidencia que haya llegado justo en plena campaña electoral. Aquí (por Cádiz) se presenta el ministro, y la gente sabe bien cuándo hay un avión de la Guardia Civil patrullando», explican fuentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado destinadas a la lucha contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar.

Fue el pasado 5 de junio cuando la aeronave recibió la orden de Marlaska de desplazarse desde la base de Torrejón -donde llevaba meses realizando únicamente vuelos de instrucción y calibración técnica- hasta Morón. Durante días, el CN-235 de la Guardia Civil recorrió de arriba a abajo el litoral sur de España para detectar pateras y narcolanchas y dar el aviso a las patrulleras para su interceptación. Misiones de entre 4 y 5 horas de duración.

La foto en Mauritania

No es la primera vez que dentro de la Guardia Civil se señala a Interior y al Gobierno de Pedro Sánchez por utilizar estos aviones con motivo electorales o propagandísticos. El pasado mes de febrero, tal y como desveló OKDIARO, Moncloa ordenó desplegar durante 5 días uno de esos Cucos en Mauritania con motivo de la visita oficial al país de Pedro Sánchez y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

Allí acudieron Sánchez y Von der Leyen para prometer un refuerzo de la lucha contra la inmigración ilegal, en vista de los datos de récord que ya mostraba entonces la ruta atlántica de entrada en Europa. Tras cinco días, en los que realizó cuatro vuelos de reconocimiento marítimo, y después de que el Falcon de Sánchez abandonase el país africano tras su fotografía, la aeronave recibió la orden de volver para España. Canarias se quedaba, así, sin  una de las principales herramientas en la lucha contra el flujo de pateras.

Meses atrás, el Gobierno y Marlaska hicieron lo mismo otras dos aeronaves enviadas a Canarias para paliar la grave crisis de inmigración ilegal de finales de 2023. Entonces, el ministro Marlaska prometió a Canarias el despliegue de medios aéreos para controlar las rutas y advertir con antelación de la llegada de embarcaciones a las costas. Sin embargo, unas semanas después de su despliegue, las aeronaves volvieron a Madrid sin hacer mucho ruido. Las cifras de llegadas, sin embargo, siguieron incrementándose hasta que España -y especialmente Canarias- cerraron el año batiendo todos los récords desde que hay registros.

Rumbo al récord

El Ejecutivo socialista prometió en otoño de 2023 que actuarían con «todos los medios necesarios» para incrementar la vigilancia marítima en aguas de Canarias contra la inmigración ilegal. Sin embargo, los refuerzos no han llegado y las cifras de pateras siguen disparadas: en lo que va de año ya han llegado el triple de pateras a Canarias que en el mismo periodo de 2023, y la previsión es que cuando acabe 2024 el balance del año rompa todos los récords.

Interior ya ha consolidado en su balance oficial este mismo lunes las cifras de la inmigración ilegal de los cinco primeros meses del año. Esos datos muestran que las pateras prácticamente se han triplicado respecto a 2023, alcanzando las 261. El pasado año, a estas alturas, habían llegado a las costas canarias 106 pateras. El número de inmigrantes ilegales que han llegado en esas embarcaciones alcanza los 17.117, lo que representa 12.000 más respecto a los 4.760. Un 259,6% más. 

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