Marlaska da esquinazo a las medallas para los 21 policías y guardias civiles muertos por Covid
Los policías estallan contra Marlaska: ni un pésame por los agentes fallecidos por coronavirus
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El Ministerio del Interior de Grande-Marlaska ya tiene datos oficiales sobre el cómputo de agentes de Policía y Guardia Civil en activo fallecidos por coronavirus: 21. Unas muertes que en ambos cuerpos policiales reclaman que sean consideradas en ‘acto de servicio’, declaración que Interior evita confirmar y que, por tanto, les cierra la puerta a ser condecorados de forma póstuma.
El ministro Fernando Grande-Marlaska ya ha puesto cifras a la tragedia interna que ha provocado el coronavirus entre sus funcionarios policiales. Interior ha señalado en el Congreso que, con datos oficiales recogidos hasta el 29 de abril, «el número de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad (incluye Policía Nacional, Guardia Civil, Policías autonómicas y locales) fallecidos era de 19, y el número de positivos de 3.535». Sin embargo, desde esa fecha hasta ahora se han registrado otros dos fallecimientos más: el de la guardia civil María Teresa Sánchez, fallecida el pasado 21 de mayo en Avilés (Asturias) y el de un agente de la Policía Nacional fallecido una semana antes en Pozuelo de Alarcón (Madrid).
Sin embargo, pese a la lucha que han iniciado las familias de los agentes fallecidos, respaldada por las principales asociaciones policiales y de la Guardia Civil, Interior continúa eludiendo entrar en el debate sobre si van a ser considerados actos de servicio y si por tanto tendrán acceso a una condecoración o reconocimiento por las labores que les costaron la vida. Interior sí considera que las bajas laborales por este motivo se enmarcan dentro del «accidente laboral», pero evita pronunciarse sobre el caso de los fallecidos.
«Ningún reconocimiento»
«No esperamos absolutamente ningún reconocimiento de Interior hacia los compañeros fallecidos, máxime cuando el ministro tardó semanas en darle el pésame a las familias de quienes habían muerto en su trabajo. Llegó a felicitar antes a los presos por su buen conducta», advierten fuentes policiales al ser cuestionadas por si les han comunicado algo al respecto. Hacen referencia con su crítica a unas declaraciones de Grande-Marlaska a finales del pasado mes de marzo.
Aquellas palabras provocaron la indignación entre el Cuerpo Nacional de Policía. Desde el Sindicato Unificado de Policía (SUP), calificaban el silencio del ministro como un «olvido doloroso e incomprensible». Ya no sólo de los agentes muertos en servicio, sino de sus compañeros jubilados, que elevan la cuenta muy por encima de esos 21.
«Para el SUP siguen siendo compañeros, como reconoce incluso la Ley Orgánica de Régimen de Personal de PN al referirse a los policías jubilados. El Gobierno de Pedro Sánchez y su ministro del Interior han decidido que estas bajas no merecen el pésame institucional exigible hacia un Cuerpo que se está dejando lo mejor de sus esfuerzos y capacidades en proteger a los demás y velar por el cumplimiento del estado de alarma, sin descuidar el resto de desafíos contra la seguridad ciudadana», advertían desde esta asociación, una de las más representativas del Cuerpo Nacional de Policía.
Propuestos para medallas
Han sido el Partido Popular y Vox quienes en las últimas semanas han planteado este debate y lo han llevado al Congreso mediante diversas iniciativas. Por ejemplo, la Proposición No de Ley presentada por el PP para que el Ministerio del Interior proceda a otorgar condecoraciones con la Cruz con distintivo Rojo para todos los agentes de Guardia Civil y Policía Nacional que han perdido la vida por culpa del coronavirus.
Esa PNL también solicita la Medalla de Oro al Mérito Penitenciario para los Funcionarios de Prisiones que han perecido por la enfermedad, así como una Cruz al Mérito Policial con distintivo Blanco (no pensionada) para aquellos agentes que hubiesen contraído el coronavirus durante sus patrullas o servicios durante la pandemia y el estado de alarma.
El PP colocaba así a los policías y su esfuerzo durante toda la crisis al nivel del realizado por los sanitarios, alegando que «las distintas Fuerzas y Cuerpos de Seguridad trabajan de forma conjunta, con los sanitarios y las Fuerzas Armadas, para frenar la expansión del Coronavirus y proteger así la población. Debemos tener presente que las funciones que realizan en su trabajo son realmente imprescindibles y que se trata de personal prácticamente insustituible». Además, incidían en la circunstancia de que «no se haya dotado de los elementos de prevención y test de diagnóstico de COVID-19 a todos ellos».
El jefe del GAR
Entre los fallecidos por el coronavirus se encuentran figuras muy conocidas y respetadas en sus cuerpos policiales. Como el caso del teniente coronel jefe del Grupo de Acción Rápida (GAR), Jesús Gayoso Rey, que falleció a finales de marzo a los 48 años de edad víctima del Covid-19, motivo por el que estuvo varios días hospitalizado.
El GAR es una unidad de élite de la Guardia Civil con sede en Logroño. El fin de semana del 7 y el 8 de marzo se desplegó en Haro, La Rioja, para confinar a un grupo de vecinos y contener un brote de coronavirus. Las citadas fuentes señalaron cuando trascendió su ingreso en la UCI que el jefe del GAR no estuvo físicamente en esta localidad durante aquel despliegue.
Los agentes portaron en Haro trajes especiales para protegerse del contagio, una indumentaria que causó sorpresa por ser hasta entonces inhabitual su uso, aunque ya sí se ha utilizado en el resto de España, tanto por miembros de fuerzas de seguridad como de personal sanitario.