Iglesias visitará al concejal de Podemos y delincuente Andrés Bódalo en la cárcel de Jaén
El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, acudirá el sábado próximo al Centro Penitenciario de Jaén para encontrarse con Andrés Bódalo, encarcelado desde hace casi un año por agresión a un edil socialista y que acumula condenas por actos violentos como agredir a una mujer embarazada durante un huelga o el asalto a supermercados.
Según informa Podemos por medio de un comunicado de prensa, Iglesias estará acompañado durante la visita por los diputados nacionales Rafael Mayoral y Diego Cañamero, compañero de Bódalo en el Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), y que también está pendiente de un juicio por actos violentos.
El violento concejal de Podemos en Jaén cumple una condena de tres años y medio de prisión por la agresión a un concejal socialista en Jódar (Jaén). A la paliza al rival político se sumaba su condición de reincidente en otras acciones violentas llevadas a cabo por el que fuera miembro del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT). En una ocasión agredió a una mujer embarazada que regentaba una heladería en Úbeda y que fue asaltada por Bódalo y sus compinches al negarse a cerrar el establecimiento durante una huelga.
Diferentes dirigentes de Podemos han pedido su puesta en libertad desde entonces, también el propio Iglesias, aunque el sábado que viene esa solicitud la hará en las mismas puertas del Centro Penitenciario de Jaén, tras la visita a Bódalo.
Podemos señala en su comunicado de prensa que el jienense está encarcelado por no haber podido interponer un recurso de segunda instancia, consecuencia a su vez de «un error administrativo» de su procuradora.
Indica también que «es uno de los 300 sindicalistas contra los que se han emprendido procedimientos penales» por haber protagonizado diferentes protestas, algo que ha llevado a «organizaciones internacionales» a alertar sobre «el peligro» de que en España se persigan las reivindicaciones sindicales.
Violento e inadaptado a la vida en prisión
La situación del concejal podemita en prisión lejos de mejorar empeora. Bódalo ha provocado numerosos altercados violentos con otros presos, se ha peleado en varias ocasiones y se muestra chulesco y desafiante con los funcionarios de prisiones. Los propios trabajadores de la prisión relatan la «inadaptación» del podemita a la vida entre rejas. No cumple los horarios, no quiere realizar las tareas de limpieza de su celda –comunes a todos los internos– por eso ya le han cambiado de compañero de celda hasta en cuatro ocasiones.
Este comportamiento aleja inexorablemente a Bódalo de cualquier tipo de beneficio penitenciario y, como no, del indulto que su compañero en Podemos y en el SAT Diego Cañamero se encargó de pedir al mismísimo Papa Francisco.