Feijóo vuelve al plan de Casado y propone que 12 de los 20 vocales del CGPJ sean elegidos por los jueces

El PP de Alberto Núñez Feijóo ha registrado una proposición de ley en el Congreso de los Diputados para que 12 de los 20 vocales del Consejo General del Poder (CGPJ) sean elegidos directamente por los jueces. De esta manera, Feijóo ha vuelto a la posición de máximos sobre la renovación del CGPJ que se encontró cuando tomó las riendas del partido el pasado abril y que había relegado para tratar de llegar a un acuerdo con el Gobierno de Pedro Sánchez

La proposición de ley, con fecha del 30 de diciembre y a la que ha tenido acceso OKDIARIO, plantea que los 12 vocales de procedencia judicial (ahora mismo elegidos por Congreso y Senado como los restantes 8 vocales juristas de reconocido prestigio) se elijan «por y entre los jueces». «La elección se llevará a cabo mediante voto personal, igual, directo y secreto, admitiéndose el voto por correo», señala el texto. Además, el Grupo Popular recoge que cualquier juez con 25 avales o el aval de una asociación se pueda presentar a estas elecciones y que cada juez pueda elegir hasta seis candidatos, tal y como ya propuso Ciudadanos en otra proposición de ley rechazada por el Congreso en septiembre de 2020.

«La exigencia por la parte de la Unión Europea es meridianamente clara para que la reforma legal tenga lugar cuanto antes, pero no con cualquier contenido: se ha exigido un cambio inmediato en la forma de elección de los vocales de procedencia judicial en el Consejo General del Poder Judicial para que los mismos sean elegidos exclusivamente por los integrantes de la carrera judicial», reza la proposición en la exposición de motivos.

Así, el PP propone un nuevo artículo 567.2 de la Ley Orgánica del Poder Judicial según el cual «los doce vocales del turno de procedencia judicial serán elegidos por y entre jueces y magistrados de todas las categorías judiciales que se encuentren en situación servicio activo. De los doce vocales, dos serán magistrados del Tribunal Supremo, tres magistrados con antigüedad superior a veinticinco años, y siete jueces o magistrados sin sujeción a antigüedad», indica la proposición.

Despolitización

Asimismo, añade en pro de la despolitización de la Justicia: «No son elegibles aquellos que hubieren sido cargo electo, miembro del gobierno de la Nación o de los consejos de gobierno de las comunidades autónomas o cargo orgánico en un partido político u organización sindical en los últimos cinco años».

En cuanto a los 8 vocales del turno de juristas, la iniciativa dice que «serán elegidos, cuatro por el Congreso de los Diputados y cuatro por el Senado, por mayoría de tres quintos de sus miembros, entre juristas de reconocida competencia, con más de quince años de experiencia en profesiones jurídicas» y que «acrediten méritos destacados en su ejercicio». Ello, siempre y cuando hayan estado en situación distinta al servicio activo al menos durante los «cuatro años anteriores», y que no hayan sido «en los cinco años anteriores» ministros, secretarios de Estado, consejeros autonómicos, diputados nacionales o regionales, eurodiputados, concejales o cargos orgánicos de un partido político u organización sindical.

Con el sistema actual

Se da la circunstancia de que cuando Feijóo presentó en el mes de julio de 2022 un pacto de Estado por la Justicia, su propuesta para renovar el CGPJ no planteaba como una exigencia lo que ahora ha llevado al Congreso de los Diputados en forma de proposición de ley, esto es, que los jueces elijan a los jueces. Aquella propuesta, que marcó la base negociadora del PP hasta finales del año pasado, aceptaba renovar el CGPJ con el sistema actual y de la mano del Gobierno de Pedro Sánchez con el compromiso de que el Consejo «recién nombrado, tomando en cuenta los modelos de países europeos con constituciones parecidas a la nuestra, presentará a las Cámaras, en un plazo de seis meses desde su toma de posesión, una propuesta de reforma del sistema de elección de los vocales del turno judicial que mejore la independencia del proceso y que garantice una decisiva participación de los propios jueces y magistrados en la elección». Esa «decisiva participación» tampoco especificaba más.

Sin embargo, la derogación del delito de sedición, que el propio Sánchez confirmó a Feijóo en una llamada telefónica, llevó al PP a romper las negociaciones el pasado noviembre. Y en el mes de diciembre, con la intentona del presidente del Gobierno de asaltar el Tribunal Constitucional, queriendo forzar al CGPJ -vía rebaja de la mayoría- a nombrar a los dos magistrados que le correspondían, Moncloa y el PP no retomaron las conversaciones, sino todo lo contrario. La situación derivó en una crisis institucional sin precedente. Los populares tuvieron que recurrir en amparo al Tribunal para frenar la maniobra que Sánchez había iniciado en las Cortes para dicho asalto. Al final, la Corte de garantías dio la razón al PP y detuvo la cacicada en el trámite del Senado.

Reclamo de la UE

Cabe recordar que el PP de Pablo Casado ya llevó al Congreso de los Diputados en octubre de 2020 una reforma de la Ley Orgánica 6/1985, de 1 de julio, del Poder Judicial para volver al sistema anterior a la reforma socialista de 1985. Sin embargo, la Cámara baja tumbó aquella proposición gracias a la mayoría Frankenstein de PSOE, Unidas Podemos y sus socios pese a que el día antes el comisario de Justicia de la UE, Didier Reynders, había reclamado el inicio de una reforma «profunda» del sistema de elección de los jueces. El texto del PP se debatió en el Pleno del 21 de septiembre de 2021 y el PSOE lo rechazó acusando a los populares del bloqueo del CGPJ, de «no acatar la ley» y «deslegitimar a esta Cámara, que tiene la soberanía popular».