La crisis diplomática con Argelia pone a España en alerta ante una nueva oleada de inmigración ilegal

Los policías especializados en vigilancia de fronteras e inmigración ilegal auguran un verano intenso en lo que a tráfico ilegal de personas se refiere en toda Europa, especialmente en los países del Mediterráneo, pero también en otras zonas del continente, aunque una vez más, uno de los países que más va a sentir esta presión será España. Si bien la guerra de Ucrania ha provocado un flujo migratorio desde el Este del continente, en los archipiélagos españoles, Canarias y Baleares, en la costa levantina, especialmente en Murcia, Almería y el resto del litoral hasta el Estrecho de Gibraltar, se están activando los preparativos para la llegada masiva de embarcaciones ilegales fletadas por mafias de trata de seres humanos.

Para colmo, la situación con Argelia no ayuda. El giro de timón del Gobierno con respecto a su postura sobre el Sahara Occidental a favor de Marruecos ha provocado la reacción argelina, protector histórico del Frente Polisario, cuyo líder, Brahim Ghali, ya ha criticado abiertamente la nueva posición de España anunciada en una carta firmada por el presidente Sánchez. Como ya hizo Marruecos en su día, relajar las medidas de vigilancia de las salidas de embarcaciones ilegales de sus costas hacia España hace que en nuestro país se activen las alarmas ante una nueva crisis migratoria.

“Argelia ya ha conseguido consolidar una ruta estable con Baleares. El verano pasado ya fueron detectadas embarcaciones llegando a islas hasta el momento menos habituales como punto de llegada. Fue el caso de Ibiza y Formentera”, explican fuentes policiales dedicadas a la vigilancia de este tipo de tráfico ilegal. Las cifras de Baleares fueron de récord en 2021. En 12 meses llegaron a todas sus islas un total de 2.392 personas de manera ilegal a bordo de 163 embarcaciones. Pues bien, de esa cifra, casi 800 personas, 770, llegaron a Ibiza y Formentera. Esta última isla recibió 555 personas.

¿Qué significan estos datos? Según los especialistas consultados, son el síntoma de una consolidación de las rutas de inmigración ilegal hacia el archipiélago. De hecho, es un fenómeno que ya observaron los expertos en vigilancia migratoria en Canarias. Si las rutas ilegales trataban de llegar cerca de las grandes islas, como Gran Canaria, la saturación de los servicios de atención y el aumento de la vigilancia policial les hizo fijarse en otros destinos inéditos prácticamente para la inmigración ilegal como Lanzarote. En 2021 fueron cerca de 3.000 los que llegaron hasta la isla, lo que supuso un refuerzo especial de las medidas de vigilancia y atención en la isla.

Campamentos

Y este verano la situación no parece que tienda a mejorar. De hecho, los últimos datos oficiales del Ministerio del Interior sobre inmigración ilegal dicen que a estas alturas del año ya han llegado casi 2.000 personas más que el año anterior de manera irregular a España, por eso la previsión es que el verano sea muy activo en lo que a tráfico de embarcaciones ilegales se refiere. En Baleares ya se han inaugurado instalaciones para recepción de personas llegadas de manera ilegal a través del mar, pero no en todos los lugares se está llegando a tiempo.

Es lo que está ocurriendo en la costa de Murcia, donde los inmigrantes ilegales se hacinan en un campamento improvisado en un dique de Cartagena rememorando las indignas imágenes que dejó el infame campamento del muelle de Arguineguín en Canarias. Pero lo peor de lo que está sucediendo en Murcia es que si bien a los ministerios de Migraciones y al de Interior la crisis migratoria de Canarias les pilló con el pie cambiado, en Murcia lleva dos años lloviendo sobre mojado y mientras siguen llegando inmigrantes, el Centro de Atención Temporal de Extranjeros sigue sin abrirse porque los ministerios de Interior y Defensa no se ponen de acuerdo. Los unos deben abrir y gestionar el CATE, pero los otros son los dueños de los terrenos en los que está construido y deben autorizar su uso. Y entre tanto, las pateras siguen llegando.

La previsión estival puede hacer languidecer las cifras de llegadas de años anteriores. España cerró 2021 con la llegada ilegal de casi 42.000 personas durante todo el año. Sobra decir que Interior ni incluyó ni piensa incluir el asalto masivo a la valla de Ceuta en mayo del año pasado, que haría que la cifra superara las 50.000 personas. “En fase de estudio”, sigue aquel episodio.

Abordar este problema se vuelve ahora más perentorio que nunca porque existen otras cifras en Europa que permiten hacerse una idea de la dimensión del problema, y el ejemplo es Reino Unido. La crisis sufrida por diferentes países ha provocado movimientos continentales y marítimos, pero es que la salida de la Unión Europea de los ingleses tampoco lo ha puesto fácil. Conclusión: en los primeros cinco meses del año 28.000 personas han cruzado de manera ilegal El Canal de la Mancha. Las fuentes de vigilancia fronteriza consultadas por OKDIARIO lo explican claramente: “Las cifras están ahí, todas las policías europeas tienen acceso a ellas. Si no se atienden no van a hacer más que subir”.

De hecho, las cifras de las últimas horas dan la razón a las fuentes de este periódico. más de 100 inmigrantes ilegales han llegado en las últimas horas a Baleares procedentes de Argelia. Cabrera y Formentera han sido las islas con más llegadas registradas. Dos destinos casi inéditos hasta la fecha que este verano serán destino habitual de las mafias de trata de seres humanos desde Argelia.