La comisión de Fernández Díaz se queda en nada por las disputas y los desacuerdos entre la oposición
El Congreso de los Diputados ha anticipado el final de la comisión de investigación sobre la supuesta utilización partidista del Ministerio del Interior en tiempos de Jorge Fernández Díaz como ministro, ya que no se ha renovado su mandato, que formalmente acaba el 8 de junio.
El Pleno del Congreso acordó el 5 de octubre la creación de esta comisión, a instancias del PSOE, pero la enfermedad de Fernández Díaz llevó a los partidos a no constituirla formalmente hasta marzo, y a partir de ahí comenzaron a correr los tres meses que se habían dado para los trabajos.
Desde entonces sólo han desfilado por ese órgano el exministro del Interior y el ex director de la Oficina Antifraude de Cataluña Daniel de Alfonso porque, tras sus explicaciones, los grupos han sido incapaces de ponerse de acuerdo sobre el resto de comparecientes ni sobre la hoja de ruta a seguir.
Así quedó demostrado en la reunión del pasado 18 de abril, cuando lo único que lograron pactar, por unanimidad, fue precisamente prorrogar hasta finales de año los trabajos de esta comisión. Sin embargo, en todo este tiempo en el que este órgano ha estado varado, ninguno de los grupos ha instado a incluir la citada renovación en el orden del día de los Plenos que se han venido celebrando.
Y, ahora, cuando han querido hacerlo, ya sólo quedaba alterar el Pleno de esta semana, que es el de los Presupuestos Generales del Estado, lo que requería unanimidad, algo a lo que el PP y Ciudadanos no han accedido. Por contra, sí se ha permitido aprobar esta semana que la subcomisión sobre violencia de género tenga 15 días más de plazo para redactar su informe.
En rueda de prensa en el Congreso, el presidente de la comisión, el peneuvista Mikel Legarda, ha explicado que decidió citar a los grupos a última hora de este lunes ante la sospecha de «la muerte súbita» de esta comisión.
«¿Para qué se creó esta comisión?»
En el encuentro de este lunes, los grupos deberán decidir si llaman a algún compareciente en los escasas dos semanas que quedan hasta su fin y si redactarán finalmente o no el informe con las conclusiones que, en su caso, deberá ser elevado al Pleno para su votación antes del 9 de junio.
Legarda ha lamentado que la comisión se haya cerrado «en falso» y sin haber cumplido ninguno de los objetivos que se había marcado. «Si no se ha querido que existiera esta comisión, entonces ¿para qué se creó?», ha planteado.
El nacionalista vasco ha criticado los «bloqueos» del PP, el PSOE y Ciudadanos durante el tiempo de vida de la comisión y que finalmente los ‘populares’ y el partido naranja hayan procedido a su «ejecución».
En concreto, Legarda les ha afeado que no hayan querido, como proponían el resto de grupos, simultanear las comparecencias con la documentación que, según ha constatado, ha estado llegando al Congreso «a cuentagotas», lo que ha sido otro de los motivos por los que esta comisión se ha dilatado en el tiempo.