Albiol: «Si alguien ha comprado urnas, o las devuelve o se las va a comer»
El presidente del PPC, Xavier García Albiol, ha advertido este domingo de que si «algún particular o alguna entidad separatista» ha comprado ya urnas, pensando en cederlas al Govern para que sean utilizadas en el referéndum anunciado para el 1 de octubre, «o las devuelve o se las va a tener que comer».
En una entrevista con Efe, García Albiol ha considerado como «metafísicamente imposible que la Generalitat haya podido comprar esas urnas, porque existe un procedimiento administrativo de contratación muy regulado» que el Govern no ha culminado.
Pero «en el supuesto que algún particular o alguna entidad separatista haya comprado esas urnas» con el fin de ponerlas a disposición del Govern de Carles Puigdemont para el 1-O, García Albiol les recomienda que «guarden la factura y no la tiren a la basura, porque una de dos: o intentan devolver las urnas o se las van a tener que comer con embalaje incluido, porque no se van a poner urnas en ningún colegio electoral el 1 de octubre».
García Albiol ha garantizado con «absoluta tranquilidad» que «el referéndum no se va a celebrar, porque el Gobierno de España no lo va a permitir», y ha advertido a las fuerzas independentistas de que lo que están haciendo «no les saldrá gratis».
«Algunos creían que intentar romper España les saldría gratis, pero la respuesta del Estado de derecho ha sido contundente y a la altura de las circunstancias», ha subrayado.
El líder de los populares catalanes se ha mostrado de acuerdo con que «se empiece a pedir responsabilidades económicas» por promover un referéndum «ilegal» con dinero público: «El Estado de derecho debe utilizar todos los recursos a su alcance para que aquellas personas que han intentado romper España reciban la respuesta pertinente, incluso con responsabilidad económica y patrimonial».
Pese a los esfuerzos del Govern, García Albiol ha asegurado que el 1 de octubre no sólo no habrá referéndum sino ni siquiera «una escenificación como la del 9N» de 2014 con colas de «ciudadanos votando en colegios públicos», porque «la legislación ha sido capaz de adaptarse» y porque el Gobierno del PP «no permitirá» que ocurra.