Telefónica, BBVA y Santander las compañías del Ibex más afectadas por la vuelta del peronismo a Argentina
Los comicios que tuvieron lugar este domingo en Argentina dieron la victoria al peronista Alberto Fernández, con el apoyo de Cristina Fernández de Kirchner. Este resultado, sumado a la grave crisis económica que atraviesa el país abre un periodo de gran volatilidad para el mercado argentino, donde compañías como Telefónica, BBVA o Santander se juegan más de un 5% del total de su facturación.
Un sector que podría verse especialmente afectado es el bancario. Y es que las entidades financieras españolas son las que mayor exposición a Argentina muestran en sus balances de acuerdo con los datos del Banco de Pagos Internacionales (BPI). Las cifras recogidas muestran que la banca española presenta un 53% del riesgo de la banca internacional.
Una de las empresas más afectadas es BBVA. La entidad presidida por Carlos Torres opera a través de su filial Banco Francés (con una participación de un 66%) y cerró la jornada de este lunes en el parqué argentino con un desplome superior a un 5%. Además, en el caso de BBVA ya se ha visto en anteriores ocasiones afectada por su exposición al país y por la devaluación del peso argentino. La otra entidad financiera del Ibex que también cuenta con una filial en Argentina es la presidida por Ana Botín. Su filial Banco Santander Rio se hundió este lunes alrededor de un 11% y cuenta ya con un 10% de la cuota de mercado del país sudamericano.
Andrés Aragoneses, analista de Selfbank, destaca que «los bancos como BBVA, con la compra del Banco Francés, y Santander son otras dos de las entidades que guardan una estrecha relación con Argentina. La región de Argentina supone el 4,9% de los ingresos de BBVA y el 2,5% de los ingresos de Santander.
El FMI al rescate
Y es que hay que recordar que el Fondo Monetario Internacional (FMI) tuvo que acudir el pasado año al rescate de Argentina, con un blindaje de 50.000 millones de dólares. Esta cifra supuso casi el 10% del PIB del país y a cambio el expresidente Mauricio Macri se comprometió a alcanzar el equilibrio fiscal de cara a 2020. En este contexto económico tan crítico, no solo el sector bancario español se verá afectado, empresas como Telefónica y Naturgy también cuentan con presencia en el país sudamericano.
En el caso de la multinacional presidida por José María Álvarez-Pallete, la compañía factura un 5% de sus ingresos en Argentina y ya en 2018, la fuerte devaluación de la divisa llevó a Telefónica a posponer su salida a Bolsa en el parqué argentino. Junto a ella, Naturgy opera a través de su filial Gas Natural BAN (con una participación de un 70%) y se ha convertido, en los últimos años, en la segunda firma del sector en el país por número de clientes.
«España es un país que tiene una larga relación comercial con Argentina, debido a factores como el idioma, por lo que hay varias compañías que tienen un ojo puesto en la situación económica del país latino, que puede afectar fuertemente a sus cotización», ha añadido Aragoneses.
Prosegur ha guardado a lo largo de su historia una estrecha relación con Latinoamérica
Otra firma española con una gran dependencia de la coyuntura argentina es Prosegur. La compañía de seguridad genera el 66% de los ingresos de su escisión Prosegur Cash en Latinoamérica y un 50% de su facturación total proviene de Argentina. Ambas se dejan un 20% en el último año como consecuencia de los problemas derivados del país.
«Dentro del continuo, hay varias empresas con grandes intereses dentro del país argentino, por lo que una devaluación del peso puede mermar sus resultados de forma drástica. Empresas como DIA (13% de sus ingresos), Ezentis (7,4%) o Codere (25%) se han visto atrapadas en la continua inflación del país anteriormente liderado por Macri y la devaluación del peso argentino», ha remarcado el analista de Selfbank.
El principal índice de la Bolsa de Buenos Aires que inició la jornada del lunes con un repunte de un 6%, cerró sin embargo con una caída de más de un 4%. Los analistas y expertos del mercado señalan que se prevé un periodo de gran volatilidad y los inversores internacionales permanecen muy atentos a cualquier movimiento.