La lista de Carrefour no incluye ni un solo producto fresco en contra de lo que exige Yolanda Díaz
La reunión de la semana pasada entre Yolanda Díaz y el CEO de Carrefour España, Alexandre de Palmas, no ha sido fructífera, al menos a lo que al Gobierno se refiere. Este lunes se ha hecho pública la lista de la compra de 30 productos que la cadena francesa ofrece a 30 euros y, en contra de lo que pedía la titular de trabajo, no incluye proteínas y frescos ni una cesta específica para celíacos.
Galletas, mermelada, pan de hamburguesa, chocolate blanco o zumos son algunos de los productos que se incluyen en esta lista, todos ellos de marca Carrefour. Sin embargo, en esta cesta de la compra no hay cabida para carnes, pescados, frutas y verduras frescas, pese a que el argumento de Díaz para topar los precios de los alimentos era que productos frescos como la lechuga o las patatas «han subido entre un 500% y por encima del 800% por la inflación». Sin embargo, la lista de Carrefour sí incluye productos de higiene como papel higiénico o pasta de dientes, algo que no pedían los ministros comunistas Díaz y Garzón.
Entre las peticiones de la vicepresidenta segunda del Gobierno se encontraban la «congelación de los precios», la variación de los productos de la cesta de la compra ofertada por las grandes plataformas de distribución, que está incluyese proteínas y frescos -pescado, carne, fruta, huevos y hortalizas- y estar disponible para las familias al menos hasta después de Navidades. Asimismo, pedía que se oferte una cesta específica para celiacos.
Busca la «persuasión moral»
José Luis Escrivá ha afirmado este lunes que la propuesta de Díaz sobre el precio de los alimentos básicos no supone un mecanismo de control de precios, sino de «persuasión moral», pues lo que busca es apelar a la responsabilidad (de las grandes distribuidoras) para ayudar a las familias ante la escalada de precios.
Escrivá ha señalado que se están poniendo sobre la mesa distintas iniciativas para que los precios se moderen, algo que él considera «positivo» en un contexto en el que la subida de precios está siendo «importante». En relación a la propuesta de Díaz, el ministro ha subrayado que, «por lo que él ha entendido», no es un mecanismo de control de precios, sino algo que los economistas denominan «persuasión moral».
«No es una norma ni se trata de mecanismos coercitivos para determinar los precios, sino de apelar a determinados elementos de responsabilidad (…) Esto a veces funciona o no», ha señalado Escrivá, que ha indicado que ello depende también de la infraestructura del mercado.