El juez avala la adjudicación al grupo Lopesan de los hoteles de Mar Abierto en Taurito por 99 millones
El juez desestima las pretensiones de Grumasa Martinón y de los sindicatos para suspender la adjudicación concursal


La Justicia ha avalado la adjudicación al grupo empresarial Lopesan de los hoteles que Mar Abierto S.L. (grupo Santana Cazorla) tiene en la zona turística de Taurito, en Gran Canaria. Ha desestimado las pretensiones de Grumasa Martinón –que pujó también, pero por mucho menos dinero que el ofrecido por Lopesan– y de los representantes sindicales de los hoteles subastados, que pretendían suspender la adjudicación concursal que ha ganado Lopesan.
Los activos de Mar Abierto S.L. salieron a subasta concursal. Esta sociedad entró en liquidación. Los administradores de este proceso distribuyeron esas propiedades en cinco lotes. Cuatro de ellos los ganó Lopesan. Fue, de lejos, la que presentó la mayor oferta económica: un total de 99,43 millones por los cinco lotes. Fueron 12,93 millones más de los que ofreció Grumasa Martinón, compañía que además sólo pujó por dos de los cinco lotes. Sólo por los lotes 1 y 2 (locales comerciales y hoteles de Taurito), la oferta de Lopesan superó en 3,7 millones la presentada por Grumasa Martinón.
Tras perder la puja, Grumasa Martinón presentó un recurso ante los juzgados de lo Mercantil para tratar de frenar la adjudicación. Así, solicitó que se decretara la suspensión del proceso, para que no surtiera efecto práctico desde este mismo momento la adjudicación concursal de esos activos a Lopesan. El comité de empresa de Mar Abierto S.L. también presentó la misma petición.
Esta pretensión, sin embargo, ha sido tumbada por el titular del juzgado de lo Mercantil número 1 de Gran Canaria, Alberto López Villarrubia. El magistrado, además, censura las anómalas prácticas que ha detectado en el procedimiento y que, de persistir, perjudicarían tanto a Lopesan como a los intereses de las propias empresas que están en adjudicación concursal y cuyo futuro depende que un grupo solvente las adquiera para darles viabilidad y salvar el empleo.
El juez, en su auto, recuerda a los recurrentes que «la subasta se rige por unas normas que deben ser respetadas», que el proceso de pujas finalizó el 11 de julio, que no cabe objeción alguna que entorpezca la adjudicación efectiva de los activos a Lopesan y que, además, la oferta presentada por este grupo empresarial es de un importe que supera en casi 15 millones de euros el pasivo concursal. Es decir, que cubre, por exceso, los 84,7 millones a los que asciende ese pasivo concursal que se debía cubrir con la subasta de esos activos de Mar Abierto S.L., compañía perteneciente al grupo Santana Cazorla.
Proyecto de futuro para Taurito
Desde Lopesan han manifestado su satisfacción por el auto del juzgado de lo Mercantil, que viene a avalar la adjudicación y que censura las dilaciones que se han producido en la subasta, con perjuicio para adjudicatarios y acreedores.
Desde Lopesan han reiterado su apuesta no sólo por reflotar y mantener el empleo íntegro de los hoteles de Mar Abierto sino el principio de un «renacer turístico de Taurito». Así, Lopesan garantiza que va a asumir toda la plantilla en las mismas condiciones laborales y salariales que tenían hasta ahora. Además, su proyecto «va más allá de gestionar hoteles y locales comerciales: plantea una transformación integral del destino, con nuevas inversiones que generen empleo adicional, impulsen la economía local y regional, y eleven la calidad de la oferta turística».
«La apuesta de Lopesan busca que Taurito se convierta en un referente internacional, que contribuya a reforzar la posición de Canarias como destino turístico a la altura de las exigencias actuales», subrayan desde este grupo empresarial.