El IPC de Alemania deja al descubierto a Sánchez: baja tres décimas hasta el 7,6%
La inflación interanual en Alemania alcanzó en junio el 7,6 %, lo que supone un descenso de tres décimas respecto a la lectura de mayo, según datos provisionales difundidos por la Oficina Federal de Estadística (Destatis). La cifra deja en evidencia a Sánchez, que achacó la inflación de España, del 10,2%, niveles no vistos desde hace 37 años, a la guerra en Ucrania. Además, se rió de los españoles al afirmar que el IPC español «demuestra la gravedad de la situación de la economía europea y española» y que confirma «la idoneidad» de las medidas del Gobierno.
De vuelta al IPC germano, el dato fue mejor de lo esperado por los expertos que estimaban que se volviese a situar en el 7,9%. Respecto a mayo, la tasa de inflación subió en junio un 0,1 %; el mes pasado, había avanzado un 0,9 % respecto al anterior.
Desde el comienzo de la guerra en Ucrania, sobre todo los precios de la energía han aumentado notablemente y tienen una influencia considerable en la elevada tasa de inflación, señala el comunicado.
Así, en junio, los precios de la energía subieron un 38 % interanual y por lo tanto en una dimensión similar a la de los meses anteriores.
Los precios de los alimentos aumentaron también con un 12,7 % por encima de la media.
El significativo encarecimiento en las fases económicas previas tiene impacto a su vez en el aumento de precios, a lo que se suman los efectos de la interrupción de las cadenas de suministro por la pandemia del coronavirus.
Los resultados incluyen efectos especiales como el del billete mensual de 9 euros para viajar en transporte público por toda Alemania y el descuento por combustible, aunque los datos preliminares no permiten precisar su dimensión, que Destatis sí que abordará en los datos definitivos que se publicarán el próximo día 13.
El IPC armonizado para Alemania, el que se calcula con criterios comunitarios, se elevó en junio un 8,2 % en términos interanuales y se redujo un 0,1 % respecto al mes anterior.