Una fuerte bronca entre Escrivá y su número dos tras el Consejo de Ministros precipitó su salida
Ni «estaba previsto», como ha asegurado este miércoles la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ni estaba cansado por el ritmo de trabajo, como han deslizado en privado otros miembros del Gobierno. La sorprendente dimisión del secretario de Estado de Seguridad Social el martes por la tarde, Israel Arroyo, un día después de que renunciara también el otro secretario de Estado del Ministerio de José Luis Escrivá, Jesús Perea, de Migraciones, se debió a «una fuerte bronca entre los dos después del Consejo de Ministros de por la mañana», explican fuentes conocedoras de la situación. Un portavoz del Ministerio ha negado que existiera ninguna disputa entre Escrivá y su número dos.
Esa «bronca» se produjo justo después de que en el Consejo de Ministros el Ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz capitalizara la aprobación de la primera Estrategia Nacional de Impulso del Trabajo Autónomo (ENDITA) 2022-2027, que ha sido confeccionada con aportaciones de varios ministerios, incluido el de Seguridad Social. Después, a la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros salió únicamente Yolanda Díaz a hablar de la Ley de Empleo -también aprobada el martes- y de la mejora de las condiciones laborales de los autónomos. Ni rastro de Escrivá.
Precisamente, la referencia del Consejo de Ministros destaca que se ha podido sacar adelante con el apoyo de las asociaciones de autónomos que, sin embargo, siguen atascadas en las negociaciones que tienen con Escrivá. Otras fuentes señalan que el ministro es el culpable de que no se alcance ningún acuerdo con este Ministerio, mientras que con Trabajo sí.
«Es más difícil llegar a acuerdos con él. Es seco en el trato y tiene un punto de prepotencia. Su secretario de Estado era más proclive al diálogo y si por él fuera se habrían cerrado más acuerdos con los integrantes del diálogo social. Las diferencias con Escrivá saltaban a la vista», señalan. «El ministro es más difícil en el trato también con la gente que trabaja con él», sentencian. La tesis de Calviño es poco creíble para las fuentes consultadas, ya que «si está previsto no salen los dos secretarios de Estado a la vez y justo después de una bronca con el ministro».
Ocho altos cargos dimiten
El goteo constante de salidas de altos cargos del Ministerio confirman esta tesis. La salida del secretario de Estado de Migraciones se produce cuando sólo llevaba 14 meses en el cargo, como publicó este diario este miércoles. Antes ya estuvo en este mismo cargo Hana Jalloul, que lo dejó para ser la candidata del PSOE a la Comunidad de Madrid el 4 de mayo pasado. Tres en dos años.
Y en la segunda escala de la dirección del Ministerio, más cambios. Por la Dirección General de Programas de Protección Internacional y Atención Humanitaria han pasado ya seis personas en estos dos años de Escrivá al frente del Ministerio.