Fracasa la Ley de Vivienda de Sánchez: el precio sufre su mayor subida desde 2022 y las compras caen

La Ley de Vivienda del Gobierno de Pedro Sánchez continúa sin provocar caídas en el precio de los inmuebles, sino que, más bien, ha generado el mayor alza del coste de los últimos dos años. En concreto, el precio de la vivienda libre aumentó un 8,1% en el tercer trimestre del año en comparación con el mismo periodo del año pasado, un porcentaje tres décimas superior al de los tres meses previos y el más elevado desde el primer trimestre de 2022, que había sido del 8,5%. Al mismo tiempo, El número de ejecuciones hipotecarias sobre viviendas habituales se situó en 1.718 entre julio y septiembre, cifra un 1,1% inferior a la del mismo periodo de 2023.

Así lo reflejan tanto el Índice de Precios de Vivienda (IPV) como la estadística de ejecuciones hipotecarias publicados ambos este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Y es que el impulso de los precios se debió, sobre todo, a la vivienda de segunda mano, que elevó su precio un 7,9% en tasa interanual, tasa seis décimas superior a la del segundo trimestre y la más alta desde el segundo trimestre de 2022, cuando también subió un 7,9%.

Por tanto, los datos muestran que la Ley de Vivienda de Sánchez no está consiguiendo lo que pretendía, sino más bien lo contrario, pues el precio de la vivienda de segunda mano lleva creciendo en tasa interanual desde el segundo trimestre de 2014.

Por su parte, el precio de la vivienda nueva se incrementó un 9,8% interanual en el tercer trimestre, tasa 1,4 puntos inferior a la del trimestre anterior. Con el avance interanual del tercer trimestre, el precio de la vivienda libre acumula ya 42 trimestres de alzas.

La Ley de Vivienda de Sánchez fracasa

El precio de la vivienda ha seguido al alza en todas las comunidades autónomas durante el tercer trimestre de 2024, registrando incrementos interanuales en todas ellas. Los mayores repuntes se observaron en Navarra, con un notable aumento del 10,7%, seguida de Andalucía (+10,6%), Aragón (+10,3%), La Rioja (+9,2%) y la Región de Murcia, que experimentó un avance del 9% en comparación con el mismo periodo de 2023.

Por otro lado, las subidas más contenidas se dieron en comunidades como Baleares, donde el precio creció un 5,8%, Cataluña, con un alza del 6,8%, y Asturias y Castilla-La Mancha, ambas con un incremento del 6,9% en la vivienda libre.

En términos intertrimestrales, es decir, comparando el tercer trimestre con el segundo, el precio de la vivienda libre aumentó un 2,8%, una subida más moderada respecto al avance del 3,6% registrado entre el primer y segundo trimestre. Este comportamiento supone el tercer trimestre consecutivo de incrementos en los precios de la vivienda.

Desglosando por tipo, tanto la vivienda usada como la nueva registraron un aumento del 2,8% entre julio y septiembre. Sin embargo, mientras el avance de la vivienda usada fue nueve décimas inferior al registrado en el trimestre anterior, el de la vivienda nueva mostró una leve aceleración, aumentando en una décima respecto al segundo trimestre.

Ejecuciones hipotecarias

Mientras sube el precio, las ejecuciones hipotecarias bajan, lo que muestra como aumenta la dificultad para obtener un inmueble en España pese a las buenas intenciones de la Ley de Vivienda del Ejecutivo. Y es que l tercer trimestre del año marcó una notable disminución en el número de ejecuciones hipotecarias sobre viviendas habituales, con un descenso del 23,8% en comparación con el trimestre anterior.

Entre julio y septiembre, se iniciaron un total de 4.121 ejecuciones hipotecarias, lo que supone un incremento interanual del 22,8%, aunque un retroceso del 25,5% frente al periodo abril-junio. De este total, 3.874 ejecuciones afectaron a fincas urbanas, donde se incluyen las viviendas, mientras que 247 se realizaron sobre fincas rústicas.

En el ámbito de las fincas urbanas, las ejecuciones hipotecarias crecieron un 22% en tasa interanual, pero disminuyeron un 25,2% en términos trimestrales. Dentro de este segmento, 2.575 ejecuciones correspondieron a viviendas, registrando un aumento del 10,2% respecto al tercer trimestre de 2023, aunque con una caída del 20,2% frente al trimestre anterior.

De estas, 2.079 ejecuciones afectaron a viviendas de personas físicas, una cifra un 1,5% inferior a la del mismo periodo del año pasado y con un descenso trimestral más acentuado del 23,8%.

En contraste, las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas de personas jurídicas se dispararon un 119,2% en tasa interanual, alcanzando las 496, aunque se mantuvieron prácticamente estables en términos trimestrales, con una leve caída del 0,4%. Por otro lado, las ejecuciones sobre solares experimentaron un aumento del 23,5% interanual, pero retrocedieron un 2,9% en comparación con el segundo trimestre, totalizando 100 casos.

En cuanto a las fincas rústicas, estas mostraron un comportamiento dispar. Las ejecuciones hipotecarias aumentaron un 37,2% en tasa interanual, reflejando una tendencia al alza en este segmento, pero registraron un descenso del 30,8% en comparación con el trimestre anterior, lo que evidencia una moderación en este mercado respecto a los meses previos.