El fabricante Ronn Motor presenta una declaración de interés para reindustrializar Nissan Barcelona

El fabricante automovilístico estadounidense Ronn Motor Group es una de las 13 compañías que ha presentado ante la Comisión de Trabajo para la Reindustrialización de las plantas de Nissan en Barcelona una declaración de interés para desarrollar un proyecto de ensamblaje de coches en las instalaciones de la Zona Franca, según han confirmado fuentes conocedoras de la situación en conversaciones con este diario.

«Ronn Motor Group es uno de los proyectos que ha presentado a KPMG –asistencia técnica de la Comisión de Trabajo para la Reindustrialización de las plantas de Nissan en Barcelona- su expresión de interés para ocupar los terrenos de la Zona Franca como alternativa industrial al fabricante automovilístico japonés». No obstante, las citadas fuentes alertan de que «la actividad del constructor de vehículos de cero emisiones de CO2 sólo ocuparía una porción de la infraestructura catalana, por lo que decenas de trabajadores se quedaría fuera del nuevo proyecto».

«KPMG se encuentra analizando los datos entregados por Ronn Motor Group para certificar su viabilidad como recambio industrial para Nissan Barcelona», explican. Una propuesta que se ha confirmado en la Comisión de Trabajo para la reindustrialización de las plantas de Nissan en Barcelona del pasado 4 de mayo -en la que los sindicatos han anunciado nuevas movilizaciones por la ralentización de las negociaciones entre las administraciones y la compañía para mantener el tejido productivo en la factoría catalana-. La próxima reunión será el 7 de junio.

De los 17 proyectos analizados por KPMG, 10 están enfocados en la creación de un conjunto de compañías de electromovilidad. 3 están dirigidos a la fabricación de vehículos de movilidad sostenible (eléctricos e hidrógeno), 2 a la fabricación de componentes y 2 a actividades vinculadas a la construcción y al almacenaje industrial.

Posteriormente, una vez la comisión establezca los proyectos que cumplan los requisitos, los inversores seleccionados deberán presentar sus ofertas vinculantes. A partir de entonces, la comisión hará una selección y sólo los proyectos elegidos entrarán en la fase de negociación con todos los integrantes de la mesa, del contrato final.

Sin avances un año después

Cuando se cumple un año del anuncio del cierre de Nissan en Barcelona, la búsqueda de una alternativa industrial que permita salvar más de 22.000 empleos todavía no se ha concretado y los proyectos que se han puesto sobre la mesa no contentan ni a las administraciones ni a los trabajadores.

El 28 de mayo de 2020, mientras España avanzaba en la desescalada de la primera ola de la pandemia, el grupo de automoción japonés tiró por tierra las escasas esperanzas que aún tenían los 3.000 trabajadores de los centros de Zona Franca, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca: el cierre de las plantas era inexorable y se haría efectivo en diciembre de 2021.

Se abría, a continuación, un proceso de búsqueda de inversores interesados en desarrollar una actividad industrial en los espacios de Nissan con el objetivo de reducir al máximo el daño sobre la economía y el empleo del mayor cierre industrial ocurrido en España en los últimos años, que golpea a un sector, el de la automoción, que supone el 10% del Producto Interior Bruto (PIB).