El Banco de España de Escrivá prevé que Sánchez no cumpla con el déficit: cerrará 2025 en el 2,8%
El Banco de España advierte que el déficit y la deuda se moderarán muy ligeramente hasta 2027 y echa en falta un plan concreto del Gobierno


El Gobierno de Pedro Sánchez no cumplirá con su previsión de déficit público -del 2,5%-, que cerrará este año en el 2,8%. Es la previsión del Banco de España de José Luis Escrivá, ex ministro de Sánchez, que saca los colores al Ejecutivo al asegurar en su Informe de Estabilidad Financiera que el déficit, que cerró en el 3,2% en 2024 -2,8% sin los gastos de la DANA-, sólo se reducirá por la retirada de las rebajas del IVA de la energía, y por la no existencia de gastos extraordinarios este año, como los de la DANA de Valencia o los generados por las sentencias en contra del Ejecutivo.
El Banco de España mantiene de esta forma su previsión de déficit que anunció en marzo, pese a que posteriormente el Gobierno hizo público el cierre del déficit de 2024, el citado 3,2% -2,8% sin la DANA-, dos décimas menos que la previsión de la entidad para el año pasado.
En definitiva, incluso el Banco de España de Escrivá pone negro sobre blanco que el déficit será este año el mismo que en 2024, que el Gobierno de Sánchez no va a reducir nada el descuadre de las cuentas públicas pese a que los ingresos tributarios siguen creciendo y romperán este año la barrera de los 300.000 millones de euros.
Según el organismo, el déficit público será del 2,8% en 2025, el mismo que en 2024 si descontamos las cuatro décimas que aportaron los gastos de la DANA y que este año no se repetirán. «El déficit se reduciría hasta el 2,8% en 2025 y el 2,6% en el bienio 2026-2027. La mayor parte de la reducción prevista (cerca de 0,7 puntos porcentuales) entre 2024 y 2027 se explica por la desaparición definitiva de las medidas temporales de apoyo ante la crisis energética y de los gastos extraordinarios registrados en 2024 por sentencias y como consecuencia de las riadas e inundaciones en Valencia», señala el informe.
Lo mismo prevé el Banco de España para la deuda pública, que en 2024 cerró en el 101% del PIB. La entidad asegura que pese a esa rebaja la ratio sigue estando más de cuatro puntos porcentuales por encima de 2019, antes de la pandemia del coronavirus.
El Banco de España prevé que la ratio se modere levemente hasta 2027, y advierte además de que hay riesgos importantes. «Las presiones sobre el gasto público asociadas al proceso de envejecimiento de la población, a las nuevas necesidades de gasto en defensa y para las transiciones digital y climática, constituyen un importante elemento de riesgo de aumento de las ratios de endeudamiento», señala el organismo.
La entidad alerta también en su informe de riesgos para la economía por esa elevada deuda, como el incremento de los costes de la deuda. Una deuda elevada supone una economía «más frágil» para responder ante posibles inconvenientes.
¿Y, ante esta situación, tiene el Gobierno un plan a corto plazo para responder a estos riesgos? Según el Banco de España, el Plan Fiscal y Estructural de Medio Plazo 2025-2028 (PFEMP) presentado por el Gobierno de España y aprobado por el Consejo de la UE en enero «carece de medidas concretas para su cumplimiento».
«Ni el PFEMP ni el Informe de Progreso que lo acompaña incorporan información sobre la evolución prevista de los componentes de los ingresos y gastos públicos más allá de 2025, lo que reduce su utilidad como instrumento de planificación fiscal a medio plazo, un aspecto que también ha destacado la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) en su valoración del Plan», insiste el Banco de España.