Vingegaard se disfraza de Indurain para dar un golpe casi definitivo a Pogacar en el Tour

Jonas Vingegaard dio un golpe de autoridad al estilo Miguel Indurain en la única contrarreloj del Tour de Francia. El ciclista danés destrozó a sus rivales con una sensacional prueba contra el cronómetro consiguiendo ampliar su renta de 10 segundos a 1:48 en la clasificación general dejando la prueba prácticamente vista para sentencia a falta de cinco jornadas.

El vigente campeón del Tour sorprendió a propios y extraños en lo que muchos consideraron la venganza de la crono de la Planche de las Belles Filles de 2020. En aquella ocasión, Tadej Pogacar arrebató el triunfo en la clasificación general al entonces líder del Jumbo Primoz Roglic con una crono estratosférica e inesperada. En esta ocasión, el cazador fue el cazado. Vingegaard, actual líder del Jumbo, sacó al esloveno 1:38 y casi tres minutos a Wout van Aert, el tercero en la prueba.

Vingegaard hizo una crono digna del mejor Indurain marcando los mejores tiempos desde el primer momento de la prueba. El líder de la carrera jugó en una liga distinta a sus rivales siendo el más fuerte tanto en llano como en subida como en descenso. A Pogacar parece quedarle ahora la heroica con un ataque lejano o esperando una pájara de su rival en las jornadas que restan. Lo que parece claro es que el esloveno irá desde ahora a tumba abierta.

La emoción por el devenir de la prueba se encuentra en su punto más álgido y para muestra está también la lucha por el tercer puesto. El español Carlos Rodríguez lo perdió en su día malo en el Tour en favor de un Adam Yates que le saca cinco segundos en la general, pero que tendrá que ayudar a su compañero Pogacar si éste realmente busca una remontada que se antoja complicada.

Lo cierto es que Vingegaard dio un tremendo golpe sobre la mesa con una crono que no se había visto con semejante superioridad en años. Pogacar tendrá que innovar para intentar ganar un Tour de Francia que se le ha puesto casi imposible con este mazazo moral. Terreno en los Vosgos hay para atacar, pero no es menos cierto que su rival es un titán y el equipo que le escolta es el mejor posible para retener un liderato.